Año CXXXVII Nº 48686
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Educación
Escenario


suplementos
ediciones anteriores
Salud 09/03
Autos 09/03
Turismo 06/03
Mujer 06/03
Economía 06/03
Señales 06/03
Educación 05/03

contacto
servicios
Institucional

 sábado, 12 de marzo de 2005  
Se recalentó la pelea entre Kirchner y la petrolera Shell
El presidente dijo que era una de las "peores" del mundo. La empresa ratificó la suba. Hubo manifestaciones

La pelea entre el presidente y la petrolera Shell ayer se recrudeció. Kirchner, después del llamado al "boicot nacional", volvió a arremeter contra la petrolera, al mencionarla como una de las "peores" empresas del mundo, en el marco de una campaña contra la gigante anglo-holandesa, que incluyó ataques a estaciones de servicios en distintas ciudades, entre ellas Rosario. En tanto, la compañía ratificó el incremento en el precio de sus productos.

Kirchner, en un acto en la Casa Rosada, ratificó ayer su deseo de que "vengan muchas inversiones" al país, pero "no las peores" y advirtió, en respuesta a las críticas que recibió, que "si defender los bolsillos de los argentinos" es "una actitud extrema, tendré que tomar todas las actitudes extremas, entre comillas, que correspondan".

El presidente de Shell en Argentina, Juan José Aranguren, defendió la decisión de la compañía de aumentar el precio de sus combustibles en razón del incremento de la cotización internacional del petróleo, y explicó que el traslado de dicho incremento a los precios internos "fue menor a la que hubiera correspondido".

El directivo ratificó que la empresa "seguirá trabajando en la Argentina, tal como lo ha venido haciendo desde 1914", y consideró que "son los consumidores los que eligen qué productos y marcas prefieren".

Asimismo, el directivo advirtió que próximamente "habrá que importar gasoil para compensar el incremento de la demanda estacional por la cosecha, y la merma en la producción que se registrará debido a la salida programada de servicio de varias plantas refinadoras".

"A los precios de cierre de hoy (por ayer) en el mercado internacional el gasoil llegará al puerto a 2,50 pesos el litro considerando impuestos, y a 1,70 peso si se aprueba el proyecto que está en el Congreso para exceptuarlo del ITC" (impuesto a la transferencia de combustibles), calculó.

También, en alusión a los cuestionamientos de los dueños de las estaciones de servicio que expenden combustibles de Shell, que se quejaron porque el llamado al boicot afectará sus negocios, aclaró el presidente que "no queremos perjudicar a las pymes que trabajan".

Shell incrementó el miércoles entre un 2,6% y un 4,2% los precios de los combustibles, lo cual desató la reacción de Kirchner, quien instó a la población a "no comprarle ni una lata de aceite".

Ante la insistencia periodística respecto de los dichos del presidente, quien catalogó a Shell como "una de las peores empresas del mundo", el ejecutivo se limitó a afirmar que "es su verdad relativa", y negó haber estudiado hasta ahora cualquier eventual reclamo judicial. Kirchner volvió a criticar indirectamente a la prensa por no haber publicado un artículo de la revista "Multinacional Monitor", cuyo origen no citó, en la que se ubica a Shell en el ranking de las "peores empresas del mundo".

Mientras tanto, piqueteros de distintas agrupaciones y otros grupos, coparon ayer algunas estaciones de servicio de Shell en Buenos Aires y Rosario, rodeándolas con banderas nacionales y dejando pintadas sobre los surtidores. Asimismo, la Presidencia de la Nación publicó avisos en los diarios porteños advirtiendo a los consumidores sobre la necesidad de defenderse de los aumentos de precios como los efectuados por Shell, y aparecieron en el centro de la ciudad afiches en contra de la empresa anglo holandesa.


Escraches a estaciones
Piqueteros momentáneamente impidieron el ingreso de automóviles para cargar nafta en las dos estaciones de servicio y efectuaron pintadas demandando la "nacionalización de Shell" y su transferencia a la estatal Enarsa, asociada a la venezolana PDVSA.

También se anunciaba un "escrache" en el Polo Petroquímico de Dock Sud, pero la policía no dispuso especiales operativos de seguridad y las protestas que se habían concretado se desarrollaron pacíficamente, tal como había pedido anteayer el presidente.

Los dueños de las estaciones de servicio de Shell se quejaban ayer de que el boicot terminaba perjudicándolos a ellos y no a la compañía, y algunos lo definieron como "una lucha de argentinos contra argentinos".

Los empresarios dijeron resultar el pato de la boda del conflicto, ya que, aclararon, Shell les vende a ellos sus productos y tienen asegurado el flujo comercial, y los que en realidad padecerán son los vendedores que quedaron en desigualdad frente a las estaciones de nafta de otras empresas que no aumentaron sus tarifas.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
En Rosario también hubo escraches.

Notas Relacionadas
Esso no se achicó y también aumenta


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados