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 sábado, 27 de noviembre de 2004  
Asaltos a casas de fin de semana en Pueblo Esther
Robó y quiso escapar nadando, pero se cansó
La policía lo sorprendió junto a un cómplice que se rindió rápidamente. Tenían un bote cargado con el botín

Los dos hombres fueron sorprendidos cuando intentaban ingresar a una casa de fin de semana en Pueblo Esther, a 15 kilómetros de Rosario. Ante eso, uno de ellos se entregó sin oponer resistencia, pero su cómplice prefirió huir. Corrió varios metros y no dudó en zambullirse al río Paraná para zafar del asedio policial. Claro que el cansancio lo venció en quince minutos y, frente a la posibilidad de que la correntada le hiciera pasar un mal momento, el ladrón devenido en maratonista de aguas abierta regresó a la orilla, donde una patrulla del Comando Radioeléctrico de Arroyo Seco ya lo esperaba para colocarle las esposas.

La insólita fuga se produjo cerca de las 20.30 del jueves en Villaguay y Río de Plata, en la zona ribereña de Pueblo Esther, donde predominan casas quintas de fin de semana. Hasta allí llegó un móvil del Comando Radioeléctrico que había sido alertado sobre la presencia de gente extraña que había ingresado a una casa de fin de semana. Cuando los policías llegaron al lugar descubrieron a dos individuos que al verse cercados intentaron escapar.

Uno de ellos, identificado como Marcelo Fabián Barnachea, de 26 años, se entregó a los pocos metros sin ofrecer resistencia. Pero el compinche, según consignaron fuentes de la Unidad Regional II, siguió corriendo en dirección al río. Así llegó hasta la orilla y al comprobar que los uniformados lo seguían, se arrojó a las aguas y comenzó a nadar.

La poca visibilidad, el cansancio y lo difícil y peligroso de la prueba hicieron que el ladrón, luego de bracear durante 15 minutos, optara por entregarse. Según la policía se trata de Rodolfo Ojeda, de 32 años. Muy cerca del lugar donde se había zambullido, y sobre la arena, la policía encontró un gomón en el que los ladrones ya habían acomodados una cortadora de césped, una garrafa de 15 kilos, un motor eléctrico y una importante cantidad de juegos de vajilla.

Luego se estableció que el bote inflable se lo habían robado a un vecino de la zona. El resto de los elementos incautados habían sido sustraídos de una casa quinta, según lo informado ayer por la policía. Los ladrones quedaron detenidos en la subcomisaría 15ª de Pueblo Esther.


Ola de robos
En los últimos meses Pueblo Esther soportó una ola de robos a casas de fin de semana. "Una temporada atrás tuvimos muchos robos, pero desde hace 15 ó 20 días había mermado un montón", reflejaba ayer por la tarde Humberto Bollachi, jefe de la comuna desde hace 16 años. "Le mandé una nota a las autoridades provinciales para que nos den un móvil de esos que tienen tirados por ahí y nosotros lo arreglamos. Pedimos por lo menos un móvil, sí hay comisarías en Rosario que tienen cuatro o cinco móviles y no los usan", dijo el jefe comunal.

Uno de los últimos golpes significativos en Pueblo Esther ocurrió el pasado 10 de octubre cuando quince jóvenes fueron detenidos tras robar en dos casas de fin de semana. Sólo uno de los detenidos era mayor de edad y entre ellos había cuatro mujeres. Los menores quedaron bajo arresto domiciliario por orden del juez de menores Jorge Cartelle algo que indignó al jefe comunal. "Le preguntaría a los señores jueces por qué le dieron arresto domiciliario a esos chicos, que durante un fin de semana hicieron cualquier barbaridad. Es una vergüenza. El juez tendría que haber tomado alguna medida hacia los padres y no darle arresto domiciliario. A esos chicos le dieron el arresto en su casa y a las horas andaban de joda por ahí", expresó Bollachi.

Pero los robos a casas de fin de semana son sólo la punta del iceberg. "En Pueblo Esther la policía no tiene móvil. Nosotros participamos del Comando Radioeléctrico de Rosario pero somos un pueblo grande y el presupuesto de la comuna no da para todo. No podemos afrontar la seguridad", advierte el jefe comunal. "Soy presidente de la cooperadora de la policía rural a nivel provincial (Los Pumas), y tenemos móviles pero no tenemos combustible para caminar. ¿Y entonces qué hacemos?. ¿Le seguimos sacando a los chacareros? Hay un ministerio de Gobierno que debe tomar cartas en el asunto", sentenció Bollachi.
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La zona ribereña de Pueblo Esther.

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