El miércoles se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Sida

El municipio y la provincia reparten masivamente condones en los barrios

El uso de preservativos evita el contagio del virus por vía sexual. Se entregaron gratis en Rosario más de 1.100.000

Isolda Baraldi / La Capital

En lo que va de 2004 la provincia y el municipio distribuyeron más de 1.100.000 preservativos gratuitamente a lo largo y ancho de Rosario. Así, año a año se está incrementando significativamente el número de profilácticos que reparte el Estado como un instrumento fundamental de prevención del HIV. El dato no es menor ya que el miércoles próximo se conmemora el Día Mundial de Lucha contra el Sida, y los gobiernos nacional, provincial y municipal se aprestan a redoblar las campañas públicas para concientizar a la población de utilizar este método para evitar los contagios por vía sexual.

"La idea es que los profilácticos estén al alcance de la mano, que no haya faltante y que cualquier persona pueda tenerlos", aseveró Mónica Jurado, una de las responsables del Programa Provincial de Control de Enfermedades de Transmisión Sexual y Sida.

Argumentos similares esgrimió el titular del Programa Municipal de Sida (Promusida), Damián Lavarello. "Se va aumentando el número de preservativos que se distribuyen no sólo en hospitales y centros de salud, sino también en la calle, entre los grupos de riesgo, en la población más joven, lo que evidentemente ayuda mucho a la prevención y control de la enfermedad", afirmó.

Según indicó Jurado, desde principios de año hasta estos días la provincia distribuyó en Rosario 810.000 preservativos mientras que el municipio destinó para el 2004 otras 350.000 unidades, casi el doble que en 2003, y ya fueron entregados más de 310 mil. La política de la distribución masiva de condones tiene su base en que es el único método para evitar la transmisión sexual del HIV.

La aparición del sida cumplió más de dos décadas y constituye una de las epidemias sanitarias más acuciantes en el planeta ya que existen aproximadamente 37 millones de personas infectadas, según el informe anual de Onusida. La Argentina detectó el primer caso en 1982 y desde entonces fueron registrados 26.000 enfermos de sida y otros 9.000 portadores de HIV.

Rosario tiene 1.160 infectados de los cuales 77 son niños. Según afirmó Lavarello, la incidencia de reactivos positivos bajó desde 1998 a 2002 en las campañas masivas de detección de la enfermedad.

En el 98, cuando se analizaron 751 personas, el 5,19 por ciento fue reactivo positivo a la prueba, mientras que en 2002 sobre 3.025 tests el índice bajó al 1,42.

Lavarello también destacó que la transmisión vertical (es decir de madre a bebé) bajó en 2003 a su mínima expresión en los efectores municipales. Y la razón está en que desde hace cinco años se consulta a las futuras mamás si quieren realizarse la prueba explicando que si la enfermedad es tratada, se evita el contagio del hijo.

"Hoy podríamos llegar a tener uno o dos casos por año de bebés enfermos ya que las mamás están controladas y se actúa con rapidez para anular las posibilidades de contagio", abundó el funcionario.

En todos los centros de salud (sean provinciales o municipales) es posible retirar preservativos sin inconvenientes e incluso sin dar la identidad. En cada efector se adopta una modalidad distinta que se adecua a la idiosincrasia del barrio. Por ejemplo, en un centro de salud provincial ubicado en Corrientes al 3800, los jóvenes concurren sin problemas a buscar condones. Por el contrario, en el dispensario de avenida Francia al 3100, los chicos son más renuentes y aparentemente delegan esa tarea en la familia. Y en un dispensario del barrio Toba directamente se deja una caja con preservativos a mano del público. "Todavía en muchos sectores es un tema tabú, o no se animan a pedir o les avergüenza hablarlo con los médicos; de este modo, después de la consulta pueden retirarlos", relató uno de los empleados.

Los preservativos se entregan gratis.