Los canallas se cuidaron con sus declaraciones

Mauricio Tallone / La Capital

Como viene ocurriendo en cada epílogo de campeonato, el fútbol argentino asistirá en las últimas tres fechas a otro final envuelto en controversias, incentivaciones y sospechas de equipos permeables a entregarse dócilmente al rival de turno con tal que el enemigo íntimo no se salga con la suya de dar la vuelta olímpica.

Precisamente esta charlatanería alcanzó a Central desde el mismo momento en que la imposición de fixture puso a los canallas en el rol de parte interesada cuando deban recibir en el Gigante a Estudiantes, por la última fecha del Apertura. Es que ese partido no sólo disparará la concreta posibilidad de que Newell's se alce con el título, sino que además ya se encargó de tirar a la hoguera de las críticas la posición que adoptaron algunos jugadores para ponerle el cuerpo a la situación.

Y si bien las declaraciones de los protagonistas no hacen goles ni ganan partidos, en estos casos siempre sirven como dato referencial para mostrar pensamientos y estados de ánimo. La munición gruesa que arrojó Emanuel Villa en la edición de ayer en Ovación, cuando entre otras cosas admitió sin tapujos que el hincha de Central quiere que su equipo vaya a menos contra Estudiantes para que Newell's no salga campeón, no tuvo el rebote esperado en sus compañeros.

Por eso en la práctica de ayer los jugadores canallas se armaron de paciencia para contar hasta diez antes de desbocarse como Tito, y la mayoría de los consultados amasó las preguntas antes de echarlas al fuego.

"Está claro que si uno piensa como el hincha no quiere que Newell's salga campeón. Es algo lógico. Pero también está la otra realidad. Yo juego para Central y a mí me pagan para que salga a ganar". Con estas palabras el Loncho Ferrari buscó distanciarse de los dichos del goleador canalla.

Otro de los que no quiso pisar el palito de la polémica fue el propio Ariel Cuffaro Russo, técnico alterno auriazul. Desde su visión de hincha, ex jugador y ahora integrante del cuerpo técnico, Cuffaro posó su mirada en casa y se olvidó de lo ajeno.

"En el grupo ni se habla de Newell's. Acá todos estamos concientizados en que si sacamos los nueve puntos que nos quedan podemos ser campeones. Hay que esperar, ganar y ver lo que pasa con los otros equipos", fue el baño de optimismo que se dio el ladero de Don Angel.

Tiene razón Cuffaro cuando dice que hay que esperar. Porque en algún momento esta ola de suspicacias levantará más polvareda.

El plantel canalla le bajó el perfil al clima de final de campeonato que se vive.