| miércoles, 24 de noviembre de 2004 | Córdoba no pudo rendirle tributo a Matías Giménez Maurico Bártoli / La Capital Así en la vida como en una cancha de fútbol, si uno no concreta lo que tiene al alcance de la mano a la larga retrocede. Eso fue lo que le pasó ayer a Central Córdoba, que pudo llevarse los tres puntos de la cancha de Platense, frente a Deportivo Italiano, pero en el alargue le convirtieron y se quedó sin nada.
El resultado, sin embargo, no puede catalogarse como injusto. Porque en un partido bastante mezquino en el juego y con muchas situaciones de gol desaprovechadas por ambos equipos, nadie puede quejarse de que le hayan dado jaque mate cuando el reloj presagiaba que la partida terminaría en tablas.
Al cabo, el centro llovido que Ozafrán no pudo alcanzar (reclamó que cargaron contra él en el área chica pero al menos desde las tribunas no se vio ningún empujón) dejó sin reacción a los defensores del once charrúa y, luego de un rebote en un palo, el defensor Acosta no perdonó desde el punto del penal. Así consiguió el triunfo cuando iban tres minutos de tiempo adicional.
Esa polémica jugada no empañó la buena actuación del árbitro Manuel Loureiro, que no compró penales ficticios, amonestó sólo lo necesario y en cada fallo no distinguió locales de visitantes. Sin dudas, fue lo mejor de la tarde. Una tarde de nubarrones que tuvo su momento más emotivo cuando al comienzo se cumplió un minuto de silencio en homenaje al fallecido Matías Giménez, con los 22 jugadores alrededor del círculo central. Todo el plantel charrúa, incluido el director técnico Cristian Domizi, llevó un brazalete negro y se había prometido dedicarle un triunfo al ex compañero.
Sin embargo, en los primeros diez minutos Córdoba parecía todavía conmocionado por el duelo y padeció cuatro sofocones. Luego, se recuperó y no estuvo tanto en riesgo, pero el despliegue de Metz y el atrevimiento de Britos dominaron la escena en los primeros 45 minutos Domizi amagó con hacer dos cambios antes del descanso, pero recién a los 55' reemplazó a Santos por Gerlo y a los 66' hizo ingresar a Petrovelli por Cárdenas.
Los intentos del enganche chaqueño hicieron que el segundo tiempo fuera más equilibrado y así Córdoba tuvo las llegadas más claras. Por lo menos hasta el tiempo de descuento, ya que antes del mazazo de Acosta, lo más relevante habían sido dos tiros de media distancia de Petrovelli y un par de desbordes del también ingresado Marinelli, que ningún compañero pudo conectar en la red.
En el balance final hay que decir que esto de fantasear con algo superior y terminar peor no es nuevo para los charrúas. Porque la no ratificación en el juego ni en los resultados de la declamada pretensión de pelear el campeonato con mayor actitud es lo que ha sufrido en las últimas cinco fechas.
Y, lamentablemente, está retrocediendo posiciones: quedó merodeando la mitad de la tabla, ya sin más pretensiones que remontar la cuesta en el próximo torneo. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Armani cumplió pero no sirvió para que Córdoba saliera airoso en su visita a Italiano. | | |