| lunes, 04 de octubre de 2004 | Estampida dentro del dormitorio Catalina Dártoli se había acomodado en la cama de su habitación para ver un programa de TV después de haber cenado con su hijo, su nuera y sus nietos. Entonces la mujer, de 84 años, sintió que la puerta se abría de golpe. Primero pensó que era "un globo" y después sintió "un estampido". La habían baleado.
La abuela de Tulio reconoció ante la Justicia que no pudo ver "quién había abierto la puerta" y también que en un primer momento pensó que "era un ladrón". Entonces fue hacia el living y vio a su hijo sentado en el sillón, con la cabeza inclinada hacia un costado. No entendió por qué su hijo no la defendía del supuesto asaltante. Su nieta Nadia estaba allí gritando y entonces Catalina salió corriendo a la calle, hacia lo de sus vecinos.
Allí esperó la ambulancia y no recuerda si alguien la acompañó en el móvil hasta el dispensario. Recién allí recuerda haber visto a sus nietos Nadia y Copito pidiéndole "no te mueras abuela, no te mueras". Dos nietos tan "buenos" como Tulio, en quien, dijo, "nunca vi nada raro". enviar nota por e-mail | | |