Villa, el anticuervo

Volvió a cumplir con su rito sagrado del gol

Alejandro Cachari / La Capital

"Lo más importante en este partido era ganar. No importaba quién hacía el gol, cómo era el marcador, simplemente había que ganar para cortar esta racha de 15 partidos. Ojalá de aquí en más comience otro campeonato para Central". La voz de Emanuel Villa fue la más escuchada en el eufórico vestuario auriazul. No era para menos. Otra vez cumplió con el rito de marcarle un gol a San Lorenzo (ver Tito, el padre de Ramírez).

"Se dio sobre la hora, pero Central fue superior durante los 90 minutos porque tuvo las mejores situaciones. Parecía que había un gualicho o algo así porque la pelota no quería entrar. Pero por suerte se cortó", amplió el encargado de cortar la serie negativa de los auriazules.

-Deben haber sentido cierta impotencia porque parecía que el partido se terminaba 0 a 0.

-Sí, seguro. Es que estábamos haciendo todo para llevarnos los tres puntos. Pegamos un tiro en el palo y el arquero de San Lorenzo tapó un par de situaciones muy claras. Pero bueno, al final se pudo conseguir el triunfo.

-¿Creés que lo único que les faltaba era suerte?

-No sé, quizás nos quedaba no fallar en el último toque, que la pelota entrara en el arco.

-El triunfo adquiere una dimensión especial, además, por la jerarquía del rival.

-Obviamente. De local tenemos una seguidilla de partidos frente a equipos grandes y con resultados como este la cosa va a andar muy bien.

-¿El gol te sirve para pelear un lugar entre los once titulares?

-Es que siempre uno trabaja para tratar de estar. Después, si te toca jugar de entrada mucho mejor. La cuestión es sumar y si uno lo hace con un gol es perfecto.

-Es cierto que el triunfo es lo único que importa, pero la inyección anímica que arrastra es tanto o más importante.

-Sí, claro. Teníamos ese karma encima nuestro y eso hace que empieces a ver un montón de fantasmas. A partir de ahora, que logramos salir del fondo de la tabla, tenemos la ilusión de que el equipo cambie.

-¿Es cierto que en las inferiores también le hiciste goles a San Lorenzo?

-Sí, es un partido especial para mí. En las inferiores de Huracán siempre tuve la suerte de convertirle. Parece que la racha sigue.

-Y en este caso para sacarse de encima una mochila importante.

-Es que al menos ahora no se va a hablar más de esa racha.

-¿Los delanteros de Central están cómodos con este esquema?

-Sí, pero es la obligación de los atacantes acomodarse a la estructura de los equipos. Este partido se planteó muy bien, pero hay que estar preparado para cualquier estrategia.

Derecho al gol. Coudet ya le bajó el centro a Villa, que saca el derechazo goleador que se mete junto al palo.