Furor de los jóvenes por los ringtones, para escuchar música desde el celular

La posibilidad de bajar melodías y temas musicales creó un nuevo nicho de negocios. El caso de Toing

La tecnología desata nichos de negocios que hasta hace muy poco hubieran resultado impensados. De la mano de la nueva generación de celulares GSM, que mejoró la posibilidad de transmitir y almacenar datos, despunta la pasión por los ringtones, que brindan la opción de escuchar melodías en el aparato móvil.

Esta pasión tiene como principales protagonistas a los más jóvenes, que están dispuestos a desembolsar de $1,5 por bajar una melodía, o $4 por el más sofisticado truetone, que permite escuchar temas musicales casi iguales a los de un equipo musical.

El negocio de los ringtones hizo furor en Europa, donde la tecnología GSM ya lleva varios años de desarrollo. Los grandes usuarios son jóvenes y la penetración alcanzó un punto de desarrollo tal que -junto a otros fenómenos masivos como el mensajero celular- son sindicados como los responsables de una nueva enfermedad, el denominado "reuma del dedo gordo" que le complica la salud a los más fanáticos.

El fenómeno no se reprodujo en los Estados Unidos, quizás porque la nueva tecnología americana alternativa a la europea fue un fracaso, pero sí prendió en Brasil y lo está haciendo en la Argentina.

En el país existen dos compañías que brindan este tipo de servicios en sociedad con las empresas de celulares. Una de ellas es Toing, con sede en Brasil pero liderada por un argentino, Fabián de la Rúa, y la otra es desarrollada por Ubbi, una empresa informática controlada por el grupo Clarín.

De la Rúa, que fue socio de Martín Varsavsky y es sobrino del ex presidente de la Nación, fundó en 1999 Pmovil en San Pablo para desarrollar esta tecnología y en 2001 abrió una filial para comercializarla en la Argentina.

Los ringtones son melodías simples y el gran boom estuvo dado por la banda de sonido de la serie televisiva "Los simuladores". Ya para desembarcar con los fonogramas originales compactados a mono que posibilitan los truetones, Toing ya compró los derechos de 200 músicos, entre ellos Fito Páez, Queen, Rolling Stones y Deep Purple.

"Este soporte les asegura a los compositores el pago de regalías y es más difícil de piratear que el resto de los soportes, ya sea por copias de CD o a través de Internet", dice de la Rúa.

De hecho, un cuarteto germano, Super Smart, acaba de lanzar al mercado un álbum en su país prescindiendo de los sellos discográficos, en sociedad con una compañía alemana que se especializa en música digital para teléfonos móviles. Y este será el único canal de comercialización para el producto.

De la Rúa sostiene que el negocio tiene grandes posibilidades. En Brasil ya colocan 1,7 millón de downloads mensuales, y en la Argentina, con un negocio más incipiente, llegan a los 80 mil copiados mensuales. En Rosario les va muy bien: prácticamente sin que mediaran acciones publicitarias para una marca nueva como Toing, en agosto tuvieron 6.000 downloads. Para mediados del año próximo prevén llegar en el país al millón de downloads por mes, gracias a acuerdos con las cuatro compañías de celulares.

Aunque el costo de 1,5 a 4 pesos por cada tema y los consumidores son jóvenes que no tienen demasiados recursos propios, ese no parece ser un problema para el negocio, porque los que pagan la cuenta del celular, o en la mayoría de los casos la tarjeta prepaga son los padres.

Música en formato móvil.