El sindicalismo mira la gran crisis del PJ

Los metalúrgicos de todo el país deliberaron en Mendoza. El 11 de octubre se nominará la nueva conducción

Carlos Colombo / La Capital

Mendoza (Enviado especial).- El consejo directivo de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que sesionó ayer en Mendoza, resolvió por unanimidad convocar a elecciones generales de delegados para el 28 de septiembre próximo. En tanto, el 11 de octubre, en Buenos Aires, será el turno del colegio electoral que nominará la nueva conducción del otrora poderoso gremio.

Con la presencia de delegados de las 52 seccionales, el encuentro tuvo su punto más caliente sobre el final, cuando la discusión recayó en el tumultuoso congreso del PJ en Parque Norte y la alusión que allí se realizó del ex líder metalúrgico José Ignacio Rucci. La polémica fue extensa y no se salvó de los palos ni Carlos Reutemann.

Con la presidencia del titular del gremio, Naldo Brunelli, y el rosarino Eugenio Chilo Blanco, las deliberaciones del orden del día fueron aprobadas por unanimidad, incluso con el voto de la combativa UOM-Villa Constitución, representada por Victorio Paulón.

Pero alcanzó con que un congresal cordobés tirara sobre la mesa lo ocurrido el viernes pasado en Parque Norte para que las diferentes posiciones que hoy conviven en la UOM se trasladaran a los discursos.

El delegado de Campana, Angel Recúpero, señaló que a él no lo representó el Lole cuando fue vicepresidente primero del PJ, "porque nunca fue peronista", y cargó también contra Carlos Menem y Domingo Cavallo.

El delegado de Casilda, Angel Gallo, defendió al ex gobernador: "Los santafesinos algo le debemos a Reutemann y no vamos a permitir que vengan a juzgarlo los de afuera". Recúpero explicó que no estaba juzgando la acción de gobierno del actual senador nacional, aunque destacó -a su entender- que "nunca fue peronista".

A su turno, Brunelli disparó: "Las ofensas (en Parque Norte) a Rucci son, en realidad, una ofensa a todos los metalúrgicos, y a los muertos hay que dejarlos descansar en paz". Ahora se espera una solicitada de la UOM en desagravio al hombre que cayó bajo las balas de Montoneros, como recordaron varios oradores.

Paulón trató de orientar el debate hacia "los verdaderos enemigos" del gobierno, al sostener que a Néstor Kirchner "no lo va a presionar la izquierda sino la derecha". También dijo que el acto en la Esma "no buscó escarbar el pasado, porque el mensaje presidencial fue sobre las bases, desde donde se debe recomponer la sociedad".

También estuvieron presentes el diputado nacional Francisco Barba Gutiérrez, el titular de la seccional La Matanza, Carlos Gdansky, y su par de Capital Federal, Antonio Caló, los tres hombres de la UOM más cercanos a Kirchner.

Tanto es así que, para la próxima conducción gremial (a elegirse en octubre), y si bien todos expresaron su voluntad de una lista de consenso, se vislumbra una disputa entre Brunelli (detenta el cargo del desaparecido Lorenzo Miguel) y Caló.

Los últimos secretarios generales fueron todos de la Capital Federal y Caló, además de representar a esta seccional, se jugó por Kirchner "cuando tenía el 6% de intención de voto", como recordó.

La UOM podría impulsar a Gdansky para una conducción unificada de la CGT. Y no sería descabellado pensar que los metalúrgicos puedan alzarse con la secretaría general de la central obrera.

Gdansky, Caló y Gutiérrez señalaron que una CGT unificada sólo servirá si está detrás de un proyecto basado en los trabajadores y en los nuevos actores sociales: los desocupados y los piqueteros.

"Con el Loro (Miguel) éramos verticales, ahora somos transversales", sentenció, un poco en broma y otro poco en serio, un delegado en el hotel Ejército de los Andes, de Malargüe, donde sesionó la UOM.