| miércoles, 31 de marzo de 2004 | Subastarán en Londres un raro cuadro de Vermeer Hace 80 años que no se vende una obra del holandés El primer cuadro del maestro holandés Johannes Vermeer en salir a la venta en más de 80 años se subastará en julio con un precio inicial de 5,5 millones de dólares y sin señales de haber llegado a su precio tope.
"Esta pintura es una rareza tal que no puedo especular sobre el precio que fijará el mercado", anticipó Alex Bell, presidente de la división de Obras Maestras de la casa de subastas Sotheby's.
"Young woman seated at the virginals" ha entrado y salido de la lista aceptada de las obras del pintor de Delft durante el pasado siglo. Sin embargo, una década de trabajos de investigación artístico forense, que incluyó análisis químicos de la pintura y los pigmentos junto con rayos X del lienzo, han convencido finalmente a los escépticos para agregar el pequeño cuadro a los otros 35 que forman parte de las obras aceptadas de Vermeer.
El pigmento utilizado en la pintura de 25 por 20 centímetros no sólo es idéntico al que usaba Vermeer, sino que el lienzo es exactamente el mismo al que usó en otra de sus obras que se exhibe en el museo del Louvre.
Cuando la delicada y ambientada obra, que muestra a una chica sentada frente a un instrumento musical y mirando fuera del lienzo, salga a subasta en Londres el 8 de julio, tras ser exhibida primero en Nueva York y París, será el primer Vermeer que sale a la venta pública desde 1921. En esa fecha, "La pequeña calle" no logró venderse en un inicio y fue adquirida finalmente en privado por unas 150 mil libras (273 mil dólares) y donada al Rijksmuseum de Amsterdam. Por sí sola, la rareza daría al cuadro un alto valor, pero a eso se suma que la última venta privada registrada de un Vermeer fue hace 49 años y sus otros 35 cuadros reconocidos cuelgan en colecciones privadas o en la Colección Real Británica.
La historia del cuadro es casi tan oscura como la del propio Vermeer, quien vivió, trabajó y murió en Delft en el siglo XVII. Se cree que pudo pertenecer en el pasado al principal mecenas del pintor, Pieter van Ruijven, y que a principios del siglo XIX pudo ser propiedad del coleccionista holandés Wessels Ryers. En 1904, fue documentado como un Vermeer en manos del coleccionista irlandés Alfred Beit, pero poco después se vio involucrado en un escándalo que implicó al maestro de la falsificación Han van Meegeren, que pintaba y vendía Vermeers falsos.
Aún bajo sospecha en 1960, la obra pasó a manos del coleccionista belga Frederic Rolin, que lo vio en una galería de Londres y, 33 años después, lo mostró a Rubinstein, dando inicio a la investigación. (Reuters) enviar nota por e-mail | | Fotos | | El precio inicial de la obra será de 5,5 millones de dólares. | | |