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 martes, 04 de noviembre de 2003

Tragedia en un humilde barrio de la ciudad de Santa Fe
Tres pequeños hermanitos murieron calcinados al incendiarse una casilla
Tenían 2, 4 y 5 años. Estaban encerrados y solos porque sus padres habían llevado a otro hijo a un hospital

Marcelo Carné / La Capital

Santa Fe.- Cuando Manuel Tello y Roxana Elizabeth Mendieta dejaron a primera hora de ayer su humilde vivienda en el barrio San José y se dirigieron al centro para llevar al menor de sus cuatro pequeños hijos al médico no sabían que la tragedia los esperaría al regreso. Es que algunas horas más tarde, al retornar a la casilla, se encontraron con un cuadro horroroso: Cristian Gastón, de 5 años; Mirta Graciela, de 4; y Samuel Martín, de 2, los otros tres hijitos de la pareja, habían muerto carbonizados en el interior de la casa.

La tragedia se desencadenó poco después del mediodía en el centro de la manzana delimitada por las calles Risso, San Juan y Zavalla, en la zona norte de esta capital. Allí vivía hasta ayer sin imaginar el espantoso desenlace la familia integrada por Tello, de 26 años, Mendieta, de 24, y sus cuatro hijitos.

El joven padre, quien ayer declaró en la seccional 9ª junto a su esposa, ambos sumidos en un profundo estado de shock, se gana la vida con las propinas que obtiene como cuidador de autos en las calles céntricas de la capital santafesina.

Aunque hasta anoche no se habían dilucidado las causas del trágico siniestro, los peritos policiales presumen que el incendio comenzó accidentalmente por un desperfecto eléctrico en el techo de la vivienda (una precaria casilla de chapas) en la cual habían quedado encerrados los tres menores.

Es que según los testimonios, la puerta de la vivienda había sido asegurada desde el exterior con una linga de acero y un grueso candado por los padres de las criaturas, con el fin de que permanecieran allí hasta su retorno desde el centro asistencial al que habían llevado al otro niño.

Al iniciarse el fuego, algunos vecinos advirtieron la dramática situación e intentaron en vano rescatar a los hermanitos Tello pero todos los esfuerzos resultaron inútiles ya que la voracidad de las llamas consumió la precaria vivienda en pocos minutos y provocó el fallecimiento de Cristian, Mirta y Samuel.

Sonia, una vecina de mediana edad que colaboró en las desesperadas tareas de rescate, relató a La Capital que con otros vecinos intentaron precaria e infructuosamente combatir el fuego arrojando con baldes aguas servidas que sacaban de una zanja ubicada de las inmediaciones. "Fue todo inútil, el fuego consumió todo en un instante, esto ha sido un espanto", dijo la mujer con los ojos inyectados por el llanto contenido.

"Incluso una persona que se identificó como policía y que estaba vestida de civil intentó forzar el candado de la puerta de acceso, pero se tuvo que retirar enseguida porque las llamas ya empezaban a extenderse hacia afuera de la casa", añadió la acongojada mujer.

Los vecinos también contaron que los chicos tenían por costumbre salir de la casa cuando no estaban sus padres y que en ese hecho había que buscar el motivo por el cual los encerraban para evitar que sufrieran percances en la calle. Aunque los jóvenes padres nunca previeron que la tragedia también podía cercarlos en ese lugar.

De nada sirvió que al escenario del trágico siniestro acudieran varios móviles policiales, ambulancias y una dotación de la Agrupación de Bomberos Zapadores. La voracidad del incendio llevó a que la labor de los socorristas se limitara a evitar que las llamas se propaguen a las viviendas linderas.

Al ingresar los servicios de emergencia a la precaria casilla, que ya había sido completamente consumida por las llamas, se encontraron con los cuerpos calcinados de los dos varoncitos y la nena, al tiempo que la policía se abocó a la búsqueda de los padres que todavía no habían retornado al domicilio.

Aunque oficialmente no se habían podido determinar hasta anoche las causas del trágico incendio, versiones extraoficiales indicaron que el siniestro se podría haber originado en un desperfecto eléctrico, supuestamente debido a un cortocircuito producido en el cableado tendido sobre el techo de la vivienda.

El barrio San José, jurisdicción de la seccional 9ª de policía, es un sector humilde de la ciudad ubicado detrás de un complejo habitacional Fonavi que se encuentra cercano al Campo Universitario, en el noroeste de Santa Fe. Está compuesto en su mayoría por viviendas precarias como la de la familia Tello que se levantan en una zona que presenta amplios descampados.

Tomó intervención en el caso el juez de Instrucción número 3, Julio César Costa, quien dispuso la realización de las respectivas autopsias de las tres pequeñas víctimas fatales del incendio.

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La vivienda en la que vivía la familia Tello.

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