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 martes, 04 de noviembre de 2003

Comisaría 18ª
Transformaron un baño en calabozo
Es por la falta de espacios en la seccional de Francia al 3200. Alojan allí a los presos con problemas de convivencia

La crisis carcelaria provincial, con penales policiales saturados de presos y siempre a punto de estallar, tiene ribetes insospechados: en una comisaría rosarina tiraron abajo el baño de la planta baja para convertirlo en un diminuto calabozo transitorio, donde alojan a internos con problemas de convivencia o los que esperan que los reciba un juez. Ocurrió en la comisaría 18ª, de Francia al 3200, que el 24 de septiembre pasado fue sacudida por un motín y hoy aloja a 56 hacinados internos.

La medida fue tomada ante el aumento de problemas de convivencia entre los mismos presos. "Es que se terminaron los códigos entre ellos", evaluó un alto jefe policial, quien consideró que los incidentes entre los detenidos son cada vez más frecuentes. Cuando uno de los internos no es bienvenido en los penales comunes, los mismos presos reclaman que sea trasladado de allí, algo que en la jerga se conoce como "pedir puerta". Es una medida que suelen aplicar con detenidos acusados de violación, acusados de asesinar a un ladrón o con enemistades previas.

La comisaría 18ª tiene dos penales -el más espacioso con capacidad para no más de 20 personas- donde se acumulan 56 presos que deben turnarse para dormir porque no caben todos acostados. Ante esas condiciones, según confirmaron dos fuentes policiales a este diario, un baño de 2x2,5 metros ubicado en la planta baja y que era utilizado por el personal de guardia, fue desmantelado y convertido en una celda para los presos incomunicados o con problemas de convivencia. "Tiene carácter transitorio. Nunca aloja a más de dos o tres internos", indicó un oficial.

El penal de la comisaría 18ª fue refaccionado luego del último motín, repelido con balas de goma y en el que los internos prendieron colchones en señal de protesta. La destrucción obligó a que las celdas fueran reparadas. En esa ocasión, dos detenidos resultaron lesionados con itakazos. Tras el incidente, la Coordinadora de Trabajo Carcelario denunció que la detención de presos en comisarías "viola todas las disposiciones nacionales e internacionales" sobre el tratamiento de personas detenidas.

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