Un juez le dio al gobierno 90 días más para negociar con acreedores

La Justicia estadounidense frenó embargos contra bienes argentinos

La demanda fue presentada por fondos buitres. Respaldo empresario al plan de reestructuración de deuda

El juez estadounidense Thomas Griesa, que entiende en un pedido de embargo de acreedores privados contra la Argentina por la cesación de pagos en la deuda pública, otorgó una nueva prórroga de 90 días al gobierno antes de autorizar a los tenedores de bonos a solicitar el embargo de bienes argentinos.

Griesa, juez federal del Distrito Sur de Nueva York, extendió la vigencia de la suspensión que ya regía sobre un fallo favorable a los tenedores de bonos.

Entre esos tenedores está Kenneth Dart, titular del fondo EM Ltd, cuya sede está en Islas Caimán y que posee 724,8 millones de dólares en incumplidos bonos argentinos.

La prórroga frena a EM y a otros inversores que eligieron litigar en los tribunales en lugar de negociar como forma de llevar adelante sus reclamos. El gobierno solicitó la prórroga con el fin de tener más tiempo para avanzar en una reestructuración de la deuda negociada con los inversores.

"Si la gran mayoría de los tenedores de bonos está esperando para ver que ofrece el gobierno, entonces ese proceso es muy importante", dijo el juez en una audiencia, antes de otorgar más plazo al país.

"No creo que esté de más decir que, siendo tan importante para tanta gente, se debe dar la mejor oportunidad posible al éxito del proceso", agregó Griesa.

Argentina, que realizó a fines de septiembre una oferta para pagar sólo un 25% de la deuda incumplida y a través de bonos con vencimiento en hasta 42 años, ha dicho en varias oportunidades que la única forma en la que los acreedores podrán recuperar sus ahorros será en la negociación y no en los tribunales.

"Este es nuestro último pedido de prórroga", dijo por su parte el abogado representante de Argentina, Jonathan Blackman. "Si las discusiones en curso culminan en una propuesta definitiva para la reestructuración, no nos opondremos a que se levante la prórroga".


Respaldo empresario
En tanto, en Buenos Aires, el ministro de Economía, Roberto Lavagna, reunió el respaldo del empresariado local en torno de la propuesta de renegociación del gobierno.

"Las entidades empresarias representativas de las distintas actividades económicas de la República Argentina renuevan el apoyo oportunamente expresado a la negociación del gobierno nacional para la reestructuración de la deuda pública externa", expresaron los ejecutivos convocados por Lavagna en un comunicado difundido tras la reunión.

Más de 50 empresarios de 18 entidades de la industria, el agro, los servicios y el comercio desfilaron por el Palacio de Hacienda poco después de las 10 de la mañana, para escuchar de boca del propio Lavagna los detalles de la negociación.

"Estas instituciones consideran que el nivel de superávit fiscal primario de 3%, comprometido en la negociación con los organismos internacionales, significa un esfuerzo de suma magnitud a realizar por la sociedad en su conjunto", agregaron los empresarios.

En el tercer y último párrafo del escueto comunicado, los hombres de negocios destacaron que "es fundamental que los recursos que la Argentina asignará a servir los intereses de su deuda sean compatibles con el crecimiento económico en marcha y la atención de la deuda social, de modo que el cumplimiento de los compromisos sea sustentable en el tiempo".

Según comentaron varios de los presentes en el encuentro de ayer, Lavagna arrancó su exposición con duros términos contra los acreedores extranjeros que rechazaron la propuesta llevada la semana pasada por el equipo económico a Europa, Japón y Nueva York.

"Los que dicen que el país tiene que pagar más que el 3% del PBI van en contra de los intereses de los argentinos y atentan contra la recuperación", fue el mensaje del ministro.

En esa línea, el titular del Palacio de Hacienda reiteró que si se quisiera pagar a los tenedores de bonos más de los 12.500 millones de pesos previstos en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) la alternativa que le queda al gobierno es un incremento de impuestos.

Así, Lavagna repitió frente a los empresarios su llamado de esta semana a la opinión pública, para que respalde el plan oficial que prevé una quita del 75 por ciento sobre el valor nominal total de los bonos en cesación de pagos.

El documento de los empresarios fue firmado por la Unión Industrial Argentina (UIA), Cámara Argentina de Comercio (CAC), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), y la Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina (Abappra).

También lo refrendaron la Unión Argentina de Entidades de Servicios (Udes), Asociación Empresaria Argentina (AEA), Asociación de Bancos Privados de Capital Argentino (Adeba), Asociación de Fabricantes de Automotores (Adefa), y la Cámara Argentina de la Construcción (CAC).

La nómina se completa con la Federación Agraria Argentina (FAA), Apyme, Coninagro, la Asociación de Empresas Servicios Públicos Argentinos (Adespa) y la Unión de Entidades Comerciales Argentinas (Udeca).

Aunque el encuentro había sido pactado ayer con los popes de todos los sectores de la economía, no se había acordado inicialmente que surgiera un comunicado de aval explícito a la propuesta oficial para la deuda, que terminó proponiendo hoy el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Alberto Alvarez Gaiani.


"No nos moveremos"
Desde Puerto Madryn, el presidente Néstor Kirchner ratificó que la oferta de una quita del 75% "es la posición definitiva del país" y anticipó que el gobierno "se defenderá legamente en todos lados".

"No nos vamos a mover de este tema, que no nos corran con amenazas", sostuvo el primer mandatario, en referencia a las causas abiertas en tribunales norteamericanos que podrían derivar en embargos de los bienes del Estado nacional.

Al salir al cruce de las críticas sobre la propuesta argentina expresadas, entre otros por el líder de Recrear Ricardo López Murphy, el jefe de Estado advirtió: "Los que dicen que Argentina tienen que pagar más deuda, están diciendo que los argentinos tienen que sacrificarse más".

El presidente señaló que "para algunos es más fácil que se ajuste a los argentinos, para darle mucho más a los acreedores", y citó el ejemplo de quienes "querían sacar el subsidio a los combustibles, al gas, rebajar los sueldos o el presupuesto universitario".

"La Argentina quebró, y si hay empresas norteamericanas que han quebrado y están pagando 14 centavos por cada dólar, nosotros estamos haciendo un esfuerzo muy grande para tratar de honrar la deuda", añadió.

Lavagna y la cúpula empresaria.