| sábado, 01 de noviembre de 2003 | En los 90 se redujo el número de operadores del sector Carlos Rosa: "La concentración puede seguir en el mercado agroexportador" El jefe ejecutivo de ACA anticipó nuevas inversiones de la cooperativa en acopios El jefe ejecutivo de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Carlos Rosa, advirtió sobre los efectos de la concentración en el sector agropecuario, que en una década vio reducida a la mitad la cantidad de empresas exportadoras, y señaló que ese proceso podría continuar porque "el mercado tiene suficiente movilidad como para pensar en nuevas fusiones, adquisiciones y alianzas estratégicas". El directivo de la principal cooperativa exportadora, que la semana pasada realizó su asamblea anual en Buenos Aires, se mostró satisfecho con el discurso del gobierno a favor de las entidades de la economía social pero aclaró que ese feeling todavía debe verse en los hechos. A la par que reclamó la puesta en marcha de un plan de infraestructura para contener el aumento de la producción, y la eliminación de las retenciones, anticipó que ACA orientará sus próximas inversiones a la construcción de acopios y puertos en el norte del país, y al sector de producción de insumos. También destacó el interés de la empresa por participar de la reprivatización del ferrocarril Belgrano.
-¿Cómo quedó ACA en el nuevo escenario económico?
-Después del proceso traumático de 2002 el sector agropecuario tuvo claramente una mejoría, alentado por algunos hechos de medidas económicas, como la pesificación y el mejoramiento del tipo de cambio, y otros que no tienen nada que ver con nosotros, como es el aumento de precios a nivel internacional, lo cual permitió amortiguar totalmente el impacto de las retenciones. Todos esos factores hicieron que el productor tuviera una mejoría notoria y pudiera restituir su capital de trabajo. Así, pudo enfrentar un año agrícola sin sistema bancario. Desde el punto de vista de ACA, el 2002 fue muy traumático porque quedamos atrapados en una pesificación asimétrica que para muchos fue muy ventajosa y para nosotros perjudicial, ya que no pudimos pesificar nuestra deuda y sí tuvimos que pesificar los créditos que habíamos dado. Ha sido un año complicado y duro pero el cierre nos encuentra consolidados. Crecimos en volumen operado en general. Cerca de 7,5 millones de toneladas.
-¿Y en participación de mercado frente a otras empresas?
-Mantuvimos la participación que teníamos antes de la década del 90, que en algún momento fue muy dura para nosotros. Ahora estamos algo por encima, en el 14 ó 15% del mercado. Pero eso no indica que en el mercado no haya habido una recomposición muy grande y que no se haya producido una concentración. De 16 empresas que tenían participación significativa en el mercado de exportación hoy sólo quedan 8. La década del 90 fue de concentración.
-¿Va a seguir esta concentración? Hay muchos rumores sobre nuevas fusiones.
-Este mercado se alimenta de muchos granos y muchas versiones. Se han conocido también desmentidas. De todos modos, da la sensación de que el mercado tiene suficiente movilidad como para pensar en nuevas fusiones, adquisiciones y alianzas estratégicas.
-¿Se van a hacer nuevas inversiones?
-Hay más actividad. No tengo conocimiento de que en el sector aceitero se vayan a hacer nuevas plantas pero sí de que se están ampliando las existentes. Lo que es bastante lógico pensando en el crecimiento de la producción. De todos modos, no será un proceso tan fuerte como el de fines de los 80, cuando rápidamente se llegó a 21 millones de toneladas de capacidad de molienda.
-¿Y en el caso de ACA?
-No estamos previendo inversiones en este sentido. Hemos participado en alianzas estratégicas con otras empresas y nuestra intención es crecer en capacidad de procesamiento dentro de esas alianzas. Nuestras inversiones están más orientadas a la originación de mercadería. Hemos logrado financiamiento a bajo costo del extranjero para llevar a las cooperativas que están aumentando su capacidad de acopio, porque se han visto rebasadas. El otro camino es que hay productores de nuestras cooperativas que han migrado a estas nuevas zonas y arrastraron a las cooperativas para que les brinden servicios. La intención de ACA es asentarse con plantas para darles el apoyo a esos productores.
-¿Les interesan los ferrocarriles?
-Nosotros ya participamos del NCA. Ahora se está hablando de la concesión del Belgrano y, siendo una empresa cerealera, estamos claramente interesados. Habrá que ver cómo se define este proceso.
-El presidente y sus ministros en reiteradas ocasiones se refirieron a la importancia de las cooperativas como eje de un nuevo desarrollo económico. ¿Esto se tradujo en acciones concretas?
-Hay que reconocer que hacía mucho que un gobierno no ponía la mirada en este sector. Pero el resto hay que verlo. Para nosotros hay temas concretos relacionados, primero con las nuevas zonas de producción. Hay mucho trabajo para hacer en materia de infraestructura. El otro punto es el de las retenciones. Estas son soportables con altos precios agrícolas pero si tuviéramos los precios de 2001, realmente estaríamos mal. Con esto quiero decir que las retenciones no pueden ser permanentes.
-Hay regiones en las que los productores cuentan con excedentes y no encuentran lugares donde invertirlos. ¿Las cooperativas pueden ser movilizadoras de esos recursos?
-Lo que pasa es que son fondos que no tienen estabilidad. Es verdad que existe liquidez pero no se trata de fondos con los que se pueda pensar en una inversión a largo plazo. Es cierto que hay excedentes en algunas regiones y la relación más clara se da en el precio de los alquileres. enviar nota por e-mail | | |