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 sábado, 11 de octubre de 2003

Reacciones dispares al Nobel de la paz para la abogada Shirin Ebadi
Desilusión en la Iglesia Católica y estupor en el régimen iraní
En contraste, otros candidatosal premio, así comoEEUU, la ONU y la UE,felicitaron a la ganadora

Roma/Teherán.- Mientras el resto del mundo derramaba comunicados de felicitaciones para la flamante Nobel de la paz iraní, Shirin Ebadi, el Vaticano y la Iglesia Católica argentina recibieron con cierta desilusión el hecho de que el galardón no haya sido para el Papa Juan Pablo II. Esto contrastó notablemente con las calurosas palabras de apoyo a la abogada iraní de otros candidatos, como el disidente cubano Oswaldo Payá y el ex presidente checo Vaclav Havel.

"El se lo merecía y hubiera sido grato que lo ganara, pero de todos modos no lo necesita", dijeron voceros de la Santa Sede a medios italianos, que percibieron en estas declaraciones cierta desazón que causó la noticia en el Vaticano. El cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, comentó, luego de calificar al Papa como "mensajero de la paz", que "si una organización desea reconocer la labor del pontífice está bien, pero él está por encima de estas cosas".

Por su parte, la Iglesia Católica argentina reaccionó casi con idénticas palabras. "Nos habría gustado que el ganador hubiera sido el Papa. Evidentemente se lo merecía, así como también lo merece la señora Ebadi", dijo el vocero del Episcopado Argentino, Jorge Oesterheld.

"Pero no creo que pueda hablarse de desilusión, puesto que la expectativa era más de los medios (de comunicación) que de la Iglesia", agregó.

El Papa tiene 83 años y está muy enfermo de Parkinson. Quienes alentaban que se lo distinguiera con el Nobel entendían que este debía ser su año, pues cumple 25 años de pontificado la próxima semana, por sus antecedentes en defensa de la paz -la última, su frontal oposición a la invasión de Irak- y, también, por su declinante salud, que hace improbable que el año que viene siga ocupando el trono de Pedro. De todas formas, en el Vaticano se destacó que el Papa enviará prontamente un mensaje de felicitaciones a la ganadora.

En su Polonia natal, el ex presidente Lech Walesa, ganador del Nobel de la paz en 1983 por haber liderado la lucha pacífica contra la dictadura comunista, se lanzó sin medias tintas contra la premiación. "No tengo nada contra esta señora (la iraní Ebadi), pero si hay alguien vivo que merecía el premio Nobel de la paz de este año, es el Santo Padre", dijo el ex presidente y ex líder sindical a la televisión de su país.

Pero por fuera del mundo católico todo fueron felicitaciones para la abogada iraní. "El premio es un reconocimiento bien merecido por una lucha de por vida en favor de la causa de la dignidad humana y la democracia", dijo el portavoz de la Casa Blanca Scott McClellan, quien subrayó que era la primera vez que el premio se otorga a una mujer musulmana.

Shirin Ebadi también recibió elogios de otros candidatos al Nobel de la paz 2003, como el ex presidente checo Vaclav Havel y el disidente cubano Oswaldo Payá. También hubo congratulaciones por parte de la Unión Europea, el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, y el gobierno de Alemania, entre muchas otras.


Irán: del silencio a la felicitación
Inicialmente, el régimen de Irán mantuvo un absoluto mutismo sobre la premiación. Salvo expresiones de diputados o medios reformistas, el régimen clerical ordenó que la televisión estatal y la agencia oficial Irna callaran la noticia. La agencia italiana Ansa precisó que el canal estatal abrió su noticiero con el contenido del sermón del ayatolá conservador Ahmad Jannati en los rezos del viernes en Teherán.

Pero horas después, y probablemente al ver la repercusión universal de la premiación de Ebadi, el gobierno cambió radicalmente el tono. "En nombre del gobierno de la República Islámica, felicito a Ebadi y considero que ello se debe a sus méritos", señaló el vocero gubernamental Abdollah Ramezandadeh, en lo que fue la primera reacción oficial sobre la atribución del Nobel de la paz a Ebadi. "Los puntos de vista de Ebadi en defensa de los derechos humanos, de los derechos de los niños y de las mujeres en particular fueron tomados en cuenta por los círculos pacifistas en el mundo y eso es un honor para la comunidad de mujeres iraníes", agregó.

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Sodano habló sobre la premiación.

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