| sábado, 11 de octubre de 2003 | Nutrientes para una ganadería de precisión El conocimiento ajustado de las carencias está enla base de una efectiva suplementación a campo Analía Flaxman (*) Los ganaderos tienen actualmente a su disposición un vasto paquete tecnológico que, en aquellos establecimientos en que se los aplica, redundan en un mejor manejo de los rodeos bovinos, con el consiguiente aumento en la producción.
Así, hoy suplementación puede considerarse un sinónimo de mayor carga animal, mayor velocidad de crecimiento y menor período de terminación del novillo. Todo ello es expresión de un mejor aprovechamiento de superficie ganadera y la consecuente posibilidad de liberación de áreas para otra utilización.
Sin embargo, existen en el país situaciones en las que el principal factor limitante de la producción es la poco estudiada existencia de carencias, clínicas y subclínicas, aún cuando el resto del manejo animal sea el correcto.
El tema de las carencias y suplementación a campo de bovinos es complejo y confuso. Complejo por las interacciones entre varios de los distintos minerales esenciales, la interacción de los minerales del agua de bebida, las variaciones de los requerimientos de acuerdo a la raza, cruzas y estado productivo/sanitario de los animales, la adaptación de los bovinos a ciertos estados carenciales permanentes y otros factores como suelo, clima y estación del año. Confuso por el desconocimiento de la situación real de cada zona del país, dado que se carece de investigaciones y datos ciertos sobre carencias.
Es necesario que el productor y los profesionales tomen algunas medidas que, si bien basan en conocimientos "empíricos", constituyen por el momento una posibilidad de solucionar los problemas de las posibles carencias.
Así, los elementos minerales constituyen sólo el 4 a 6% del cuerpo del animal vertebrado. Sin embargo, debido a las diversas funciones que cumplen en el organismo son muy importantes en el campo de la bioquímica nutricional.
Dado que la alimentación es uno de los rubros de mayor incidencia en el costo de producción, la suplementación tiene en sí una gravitación fundamental. El precio del alimento y el del producto final definirán el nivel y el período de utilización del suplemento.
Además del precio del concentrado y del producto, la decisión de suplementar debería estar ligada a la respuesta animal esperada, es decir a la cantidad de carne producida por unidad de concentrado consumido. Surge así que, si bien son importantes los precios del concentrado y del producto a obtener, la conveniencia o no de suplementar depende en gran medida de la respuesta animal.
De la producción y procesamiento de alimentos para el hombre se originan numerosos subproductos y residuos que pueden ser destinados a la alimentación animal. En general presentan la particularidad de ser muy concentrados en uno o más nutrientes, por lo que se deben analizar cuidadosamente para combinarlos en forma correcta con otros alimentos en dietas equilibradas.
Para satisfacer los estrictos requisitos de calidad y cumplir con las disposiciones legales vigentes, los fabricantes de premezclas y alimentos para animales deben manejar los aditivos con mayor precisión. Sólo los mejores ingredientes elaborados por un fabricante confiable y experimentado son lo suficientemente buenos para que pueda mantenerse la calidad y el rendimiento de los alimentos.
Los productores actuales utilizan menos alimento para producir animales de alto rendimiento y en excelentes condiciones de salud. Por ello la biodisponibilidad de los nutrientes agregados a los balanceados modernos se convirtió en un factor crucial.
Los aditivos de alimentos para animales deben soportar los nuevos procesos agresivos cada vez más frecuentes en la industria del alimento, además de resistir el contacto prolongado con componentes potencialmente agresivos presentes en las premezclas concentradas.
A medida que aumentan el tamaño de las instalaciones para la fabricación de las premezclas y los alimentos, la productividad adquiere un nuevo significado, y la fluidez de los ingredientes se convierte en un criterio importante.
Los ingredientes que generan polvo son desagradables de manejar y contribuyen a la contaminación ambiental. En el caso de los productos para la salud animal, el polvo puede suscitar además contaminación cruzada en plantas de fabricación, así como la seguridad e higiene de los operarios. Aumentando el diámetro de las partículas se consiguen productos que generan poco polvo, así tenemos hoy productos granulados, más o menos finos, que permiten una buena mezcla.
Otra característica de calidad importante de los alimentos actuales es la elevada homogeneidad del contenido. Para lograrla se requieren procesos de fabricación bien diseñadas y controladas, así como aditivos de alta calidad y con muy buena miscibilidad. La miscibilidad de los aditivos depende del diámetro y el numero de sus partículas.
Las modernas formas de alta calidad y rentabilidad de los aditivos demuestran el compromiso con la industria de la alimentación animal.
La relación óptima entre la oferta y la demanda de tecnología es una ecuación en constante equilibrio y para determinar el punto de eficacia es necesaria una fuerte integración entre el empresario y los asesores técnicos. Esto permite además alimentar un mecanismo de retroalimentación importantísimo para corregir defectos y recoger observaciones que perfeccionarán la actividad.
(*) Ingeniera agrónoma enviar nota por e-mail | | Fotos | | La suplementación es un factor clave. | | |