Irak compró secretamente unos 1.000 misiles antitanque rusos Kornet, según la revista estadounidense Newsweek. La publicación, que cita al Pentágono, afirma que Bagdad compró los potentes y ligeros misiles a un traficante de armas ucraniano y posiblemente a "algún pequeño empresario-general sirio, o al mismo gobierno sirio". Los misiles Kornet habrían sido utilizados para atacar a dos tanques estadounidenses Abrams M1A1, "los primeros destruidos por fuego enemigo en combate". El Abrams es el orgullo de las tropas de EEUU. Los Kornet, a diferencia de los viejos lanzagranadas RPG en uso entre los iraquíes, poseen tecnología de punta y potencia suficiente para penetrar el blindaje más grueso. Su sistema de guía permite lanzarlos en plena noche o en la niebla.