Después de tres días de discusión y tras provocar dos renuncias en el bloque oficialista, Diputados dio anoche media sanción a la delegación de poderes especiales para el ministro de Economía, Domingo Cavallo. La iniciativa, que hoy desembarcará en el Senado, donde se espera un tratamiento más veloz, permitirá al gobierno llevar adelante una reforma del Estado -sin podas salariales ni de haberes jubilatorios-, bajar o subir tributos, cambiar leyes y aplicar el impuesto a las ganancias sobre las acciones y los bonos. Las críticas obligaron a moderar los superpoderes: se prohibieron explícitamente despidos masivos del Estado y privatizaciones, la modificación de la legislación laboral del sector privado y el recorte a las asignaciones familiares. Pero el revés más importante que enfrentó el gobierno fue la caída de un párrafo que autorizaba a garantizar los títulos de la deuda con recursos y activos del Estado, como la recaudación impositiva. El lunes, el oficialismo consiguió aprobar el capítulo sobre reforma del Estado. Ayer, se votó la posibilidad de crear o eliminar exenciones impositivas, autorizar la compensación del IVA a determinados sectores de la economía, como los medios de comunicación, y aumentar o bajar impuestos por regiones. La crisis política en la Alianza volvió a hacer eclosión en el Parlamento: la diputada Elisa Carrió renunció al bloque radical. Al fundamentar su decisión, la legisladora expuso una trama de vínculos entre funcionarios del gobierno y entidades financieras de crédito (ver página 11). Previamente, la frepasista Alicia Castro había dado un paso al costado del bloque oficialista. La votación mostró un nuevo juego de alianzas entre la UCR, la mitad del Frepaso, el menemismo, los diputados provinciales y Acción por la República. La oposición agrupó a los frepasistas críticos, el socialismo, Carrió y la mayor parte del PJ. En pleno debate punto por punto, el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, el radical Raúl Baglini, aseguró que los cambios impositivos serán una facultad para impulsar "la mejora de la competitividad de sectores y regiones". El jefe del bloque aliancista, Darío Alessandro, dijo que "acá se juega la posibilidad de hacer políticas activas". La resistencia de los legisladores consiguió que se exceptuaran a las cooperativas, mutuales, obras sociales y sindicatos de las futuras eliminaciones de exenciones impositivas. "Desde (el ex ministro de Economía José Alfredo) Martínez de Hoz se viene intentando quitar las exenciones impositivas a las cooperativas y gravarlas con ganancias", se quejó, a su turno, el socialista Héctor Polino. Por el contrario, Baglini rechazó un pedido de excepción para los medios de comunicación en las futuras exenciones del IVA. "No estamos dispuestos a dar un cheque en blanco al gobierno. Esta cláusula gatillo puede condicionar la libertad de prensa", agregó el jefe del bloque del PJ, Humberto Roggero. El oficialismo terminó por abrir ambas propuestas a votación. La posición oficial se impuso por 112 votos contra 109. Si el artículo se aprueba ahora sin cambios en el Senado, el gobierno contará con una herramienta para extender el IVA a los medios. El intento del peronista Mario Cafiero por cerrar el camino a futuras rebajas de los aportes patronales también fue rechazado. Ayer, el eje de la discusión giró en torno al artículo que permite derogar las normas que "perjudiquen la competitividad de la Economía". La vaguedad de la propuesta cosechó una multitud de críticas. "Lo único que falta es (Jorge Rafael) Videla", se quejó el justicialista José María Díaz Bancalari, ante la amplitud de la exigencia. Su par de bancada, Rodolfo Frigeri, pidió que el gobierno mande al Congreso las leyes que se quieren derogar y advirtió que, de lo contrario, se "conspira contra la seguridad jurídica". La maratónica sesión concluyó a las 22.42. Ahora, los superpoderes llegarán al Senado, que comenzará a tratarlos a partir de las 14. Horas antes, Cavallo había discutido con el bloque de senadores del PJ los términos de la cesión de facultades que reclama (ver página 10). Además, aprovechó la oportunidad para respaldar a los legisladores opositores cercados por las denuncias de presuntos sobornos, actitud que le valió duras críticas: el diputado frepasista Rafael Flores dijo que "no se puede cambiar apoyo político por impunidad". Un síntoma de la alianza que viene.
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