El ministro de Economía, Domingo Cavallo, acordó ayer con el bloque de senadores del PJ los términos de la cesión de facultades que reclama con la ley de competitividad. Además, el funcionario respaldó a los legisladores opositores ante las denuncias de sobornos realizadas por la aprobación de la polémica reforma laboral. Paralelamente, el presidente provisional del Senado, Mario Losada, convocó al cuerpo para que sesione desde hoy, a las 14, con el objetivo de tratar la segunda parte del proyecto que fue votado en Diputados.
El mayoritario bloque peronista aún mantiene un par de diferencias con el texto que votaron los diputados y se las manifestaron a Cavallo en la visita que realizó el hiperkinético ministro.
Uno de los ítems cuestionados por el PJ es el referido al plazo del otorgamiento de las facultades especiales; en el cual el PJ quiere que sea de seis meses y el Ejecutivo insiste en su idea de que sea por un año. "Hemos hablado de todas estas acusaciones que van y vienen, y yo les digo con sinceridad que hay que encontrar la forma de que se dignifique la política a través de lo que hacemos, también desjudicializándola", sostuvo Cavallo.
En ese sentido, el jefe del Palacio de Hacienda enfatizó: "Hubo un abuso de las acusaciones judiciales. Yo también fui víctima de esas acusaciones y por eso entiendo bien lo que les está pasando a los senadores". No obstante, quedó un punto sin consensuar, que será el que determine si el Senado le introducirá hoy modificaciones a la norma, cuando la trate en el recinto: la duración que tendrá la delegación de poderes especiales.
En una breve reunión que se desarrolló en la sede del bloque del PJ, Cavallo les pidió a los senadores que dejaran vigente el plazo de un año concebido por el gobierno, pero los legisladores le explicaron su voluntad de reducirlo a la mitad.
Inesperada defensa
La bancada mayoritaria determinará hoy, en una reunión convocada a las 10, si aceptará el reclamo gubernamental o si mantendrá su actual posición, con lo cual se forzaría un regreso del proyecto a Diputados para su segunda revisión. El encuentro que mantuvo Cavallo con los senadores tuvo un tono "muy amable", para lo cual desparramó promesas de comprensión hacia la situación económica de las provincias y una inesperada defensa de los legisladores investigados por el supuesto pago de coimas.
Para que no quedaran dudas de la nueva frecuencia en la que discurre la relación con la oposición, Cavallo elogió a viva voz "el modo en el que trabajó el Senado" en los últimos días, "con gran responsabilidad y patriotismo".
Previamente, se había comprometido a no afectar la estabilidad de los trabajadores estatales, no rebajar salarios y, especialmente, a contemplar durante su gestión la difícil situación financiera de la mayoría de las provincias.
Los senadores aprovecharon para pedirle que, "una vez que pase la emergencia, parte de lo que se recaude con el impuesto a las operaciones bancarias se destine a las provincias".
La Ciudad
