Las autoridades de la Cámara de Diputados y el Senado se comprometieron a dar sanción mañana a la delegación de facultades al Poder Ejecutivo por un año, con la salvedad de que no podrá ser usada para producir despidos o rebajar salarios en la administración pública, ni efectuar privatizaciones.
La posibilidad de dar una rápida aprobación en el Parlamento a los artículos que restan tratar del proyecto de ley de competitividad quedó abierta a partir de un acuerdo entre los bloques de la Cámara baja para trabajar sobre este tema durante el fin de semana y declarar en "sesión permanente" al cuerpo.
En una conferencia de prensa ofrecida en el salón de los Pasos Perdidos del Congreso por el presidente de la Cámara baja, Rafael Pascual, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, y el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, el diputado radical declaró a su cuerpo "en sesión permanente" a partir de hoy a las 14.
"He resuelto convocar a esta Cámara en sesión permanente a partir de las 14 de mañana (por hoy) hasta que se aprueben las leyes que están en debate", aseveró Pascual, con lo que hizo alusión a los artículos de la ley de competitividad que hacen referencia a la delegación de facultades legislativas.
Si bien hasta el momento parte del propio bloque oficialista, el justicialismo y los partidos provinciales habían planteado objeciones al alcance de esta delegación de facultades, lo cierto es que las expresiones del ministro de Economía en el Salón de Pasos Perdidos parecieron dar por destrabado el conflicto.
"No va a haber ningún impedimento en poner una cláusula de esa naturaleza porque no hay ninguna intención de utilizar estas atribuciones para provocar despidos masivos o para bajar sueldos o jubilaciones; es cuestión de ponerse a redactar la cláusula", afirmó Cavallo en el marco de la conferencia.
Las modificaciones
Distintas fuentes parlamentarias coincidieron en señalar ayer por la tarde que funcionarios y legisladores intentaban avanzar en distintas reuniones en una nueva redacción del artículo 11 del proyecto de ley de competitividad que tantos resquemores generó en los últimos días en el Congreso.
De este modo, podría existir un principio de acuerdo entre las bancadas de la Cámara alta y la baja para aceptar la delegación de facultades siempre y cuando sea dejada afuera explícitamente la posibilidad de producir despidos o reducir salarios de la administración pública o disponer privatizaciones.
Es así que quedaría afuera del proyecto el punto que daba potestades al Ejecutivo para que, en nombre de un "mejor funcionamiento" o de la "eficacia" en la gestión pudiera transformar "total o parcialmente" en empresas a entes autárquicos, o a reparticiones descentralizadas o desconcentradas, o sujetar a su personal a "normas de derecho privado".
De este modo, a partir de hoy los legisladores comenzarán a analizar informalmente en el Congreso el texto para la delegación de facultades legislativas al Ejecutivo y, de acuerdo con lo previsto, el domingo por la tarde habría sesión primero en Diputados y, luego, en el Senado.