Mil autopartes en un desarmadero trucho

Unas mil autopartes presuntamente robadas y al menos tres vehículos a punto de ser desaguazados fue el saldo de un allanamiento realizado ayer en un desarmadero clandestino de autos ubicado en bulevar Oroño al 6000, en el extremo sur de la ciudad. El propietario del galpón quedó demorado, pero al cabo de unas horas volvió a la calle porque el delito que se le imputa es excarcelable, según dijeron fuentes de la investigación.

El operativo se produjo sobre el mediodía de ayer cuando, con una orden de allanamiento extendida por el juzgado de Instrucción Nº7, a cargo de Eduardo Suárez Romero, agentes de la Sección Sustracción de Automotores de la Unidad Regional II llegaron hasta el local de Oroño al 6100 ante la sospecha de que en ese lugar funcionaba un desarmadero clandestino de autos.

Según fuentes de la pesquisa, en el lugar se descubrieron "960 autopartes correspondientes a modelos superiores al año 1998 y tres automóviles listos para ser cortados. El propietario del local no sólo no tenía la habilitación que se requiere por parte del Registro de Desarmaderos, sino que no tenía documentación que acredite la compra de toda la mercadería que tenía".


Sin números
Los vehículos estaban guardados en un terreno baldío que está conectado con el local a través de un portón Se trata de un Renault 12 un Renault Kangoo y un Volkswagen Gol cuyos dominios no fueron dados a conocer A esos coches ya les habían eliminado los números de chásis y motor explicó un vocero de la Jefatura que sostuvo que ahora se está rastreando si son robados para saber dónde y cuándo fueron levantados

Finalmente, el local quedó clausurado por orden de la Justicia. Por un lado, por disposición del juzgado de Faltas Nº1. "El problema es que el lugar no estaba inscripto en el Registro Unico de Desarmaderos de reciente creación. La otra cuestión es que el propietario no pudo acreditar la procedencia de esa enorme cantidad de repuestos".

Otra cuestión será dirimida por el juez de Instrucción que tendrá que determinar si el comerciante puede ser imputado de encubrimiento agravado por el robo de los vehículos.