La lluvia no dio tregua y ya son 2.100 los evacuados

La copiosa lluvia que azotó desde ayer a la ciudad y su zona causó anegamientos, cortes de energía, problemas en viviendas y edificios públicos. Ya son 2.100 los evacuados al Batallón 121 y el estadio cubierto de Newell's.

En algunas zonas, la realidad se volvió alarmante, como en ciertas áreas del barrio Nuevo Alberdi, donde el agua alcanzó el metro y medio y más de 900 personas abandonaron sus hogares.

El Batallón de Comunicaciones 121 superó su capacidad máxima y ya son 1.400 los evacuados, mientras que en las instalaciones de Newell's Old Boys, suman cerca de 700.

El panorama no se presenta para nada alentador si se tiene en cuenta que los pronósticos meteorológicos prevén que las precipitaciones continuarán hasta el viernes con distinta intensidad. Así lo hizo saber el Servicio Meteorológico Nacional, desde donde alertaron ya que el clima no mejorará en cuatro días, y que para colmo se esperan lluvias aún más intensas el jueves y el viernes.

La situación obligó a un trabajo conjunto entre las áreas de Defensa Civil, Promoción Social y Salud, para garantizar la contención y atención de las personas que momentáneamente quedaron sin techo. Y pasado el mediodía, desembarcó en la ciudad la Secretaría de Promoción Comunitaria de la provincia. Su titular, Juan Carlos Forconi, viajó para reunirse con la vicegobernadora María Eugenia Bielsa y definir la intervención provincial. “Ya estuvimos en contacto con el secretario de Gobierno del municipio, Juan Carlos Zabalza, y con el de Promoción Social, Pedro Pavicich, para ponernos a disposición de la Municipalidad. Y nos interesa evaluar la situación de las localidades aledañas a Rosario, donde sabemos que también ha habido grandes inconvenientes”, afirmó.


Al Batallón
Llegado el mediodía de hoy, los evacuados habían alcanzado los 800, pero treparon a los 1.400, según informaron desde Defensa Civil.

Los vecinos son trasladados a los centros de salud y desde allí al estadio cubierto del Parque Independencia (luego de que la capacidad del Batallón de Comunicaciones 121 se viera desbordada), donde se les ofrece infraestructura, mantas y comida.

Antes del mediodía, Pavicich ya estimaba que pasado el mediodía habría que evacuar unos mil rosarinos, "principalmente de las zonas norte y noroeste, en especial del norte de barrio Industrial y de Nuevo Alberdi. Allí, la situación se torna más crítica por el desborde del canal Ibarlucea”, explicó el funcionario, y añadió: “El estado sanitario es bueno en general, pero se necesita ropa de abrigo, principalmente para los chicos”, lo que incluye zapatillas, buzos y toda la indumentaria que se pueda acercar a la sede de la Central de Operaciones de Emergencias Municipal, en avenida Francia 1940, desde donde se realizará la distribución de lo recibido.

Eran las 15 y los pronósticos del funcionario ya habían sido ampliamente superados, con 1.200 evacuados y un panorama desalentador. Es que las cosas se complicaron demasiado el Nuevo Alberdi, donde el agua llegó en algunas casas al metro y medio, y sólo allí un total de 900 personas buscaron refugio fuera de sus hogares.

El problema con los canales Ibarlucea y Salvat es que sus cuencas abarcan otras localidades aledañas a Rosario, de modo tal que cuando llueve, sobre estos canales desagua toda la lluvia de una importante zona, incluso cuando la tormenta se disipa. Por eso, son zonas que lleva más tiempo sanear. En rigor, ya están licitados los trabajos de canalización para ambos cursos, lo que solucionaría en gran parte los desbordes. Se calcula que en 24 meses estos trabajos quedarán terminados.


Anegados y sin luz
En cuanto a la falta de energía eléctrica, la EPE informó que ya registró unos 5 mil clientes afectados, dentro de los que la prioridad para la empresa es el barrio Cabín 9, la zona delimitada por 27 de Febrero, Circunvalación, Biedma y límite municipal, y luego los barrios Municipal y Nuevo Alberdi, en el radio de las calles Boyero, Bouchard y Morrow. Además de estos dos sectores, las zonas comprendidas por Pellegrini, Provincias Unidas, 27 de Febrero y Furlong; Salvat, Cosquín, Presidente Kennedy y el límite norte del municipio; Baigorria, Machain, Washington y las vías del ferrocarril, son las zonas más afectadas por la falta de energía eléctrica, lo que según la EPE se solucionaría a primera hora de la tarde siempre tendiendo en cuenta las condiciones climáticas reinantes.

Otro de los lugares que presentan problemas no está justamente en la periferia: el Pami I, ubicado en Sarmiento al 300, se llueve y el hall ya está inundado. Lo mismo ocurre con la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo, donde el techo de policarbonato quedó destruido después del granizo del 15 de noviembre y ahora es un verdadero colador por donde se filtra el agua. Según dijeron los delegados de los trabajadores, la reparación demandaría unos 95 mil pesos. Y las inmediaciones del hospital Carrasco ya están completamente anegadas y el agua amenaza con meterse en el centro asistencial.

En tanto, el río ya había alcanzado a las 8 una altura de 5,06 metros, lo que obligó a la Prefectura local a declarar un alerta. Si bien la fuerza aún no debió intervenir en evacuaciones, el jefe de Operaciones, Juan Merlo, aseguró que se está en coordinación con Defensa Civil para el momento en que fuera necesario entrar en acción.


Los más afectados
Ayer se registraron 144 milímetros de agua caída y hoy se sumaron 70 milímetros, lo que obligó a evacuar vecinos de Nuevo Alberdi Oeste, barrio Santa Lucía, Stella Maris, el barrio Toba de Travesía y Paso, Olivé y Olavarría, barrio Industrial y Ghandi al 5200.

Mientras el arroyo Ludueña muestra niveles altos, el Ibarlucea superó en 50 centímetros el nivel de alerta.

En Nuevo Alberdi siguen evacuando. En el Batallón ya no hay más lugar.