Carisma, ambición y una fría perseverancia

Tiene carisma, es fotogénica, ambiciosa y posee una fría y calculadora perseverancia: Ségolène Royal, una política regional de 53 años y desde hace tiempo la favorita de los medios, quiere ser la primera mujer en mudarse al palacio del Elíseo. El porqué esta madre de cuatro hijos y pareja del jefe de los socialistas, François Hollande, está tan segura de que logrará postularse como candidata lo explicó ella misma: "Soy la única que puede ganarle a la derecha. Represento ese cambio profundo que quiere la gente", dijo. Hija de un oficial, Royal se presenta a sí misma como "heredera espiritual de François Mitterrand". Ante la fuerte oposición dentro del propio aparato del Partido Socialista, Ségolène dio muestras de resistencia. Muchos habían vaticinado que se quedaría sin aire, pero la "gacela" se ha adelantado a los "elefantes", las viejas caras del partido como Laurent Fabius. En los debates entre candidatos, Royal evitó la postura tradicional del partido y exigió, por ejemplo, una actuación más dura contra los jóvenes difíciles.