El Papa lamentó el efecto de sus afirmaciones pero no se retractó

En un comunicado, el Pontífice dijo que sus dichos sobre Mahoma y la violencia fueron malinterpretados

Roma. - Tras las violentas protestas en el mundo musulmán, el Papa Benedicto XVI hizo saber que "lamenta intensamente" que algunos pasajes de su discurso en Alemania el martes pasado haya podido sonar ofensivo contra el islam. Pero no se retractó como exigen de manera unánime autoridades clericales y civiles del mundo islámico. Ayer se sumó al reclamo el premier de Turquía, país que debe visitar Benedicto XVI en noviembre próximo. En círculos vaticanos se considera que el viaje está en peligro. Mientras, las protestas violentas continuaron y ayer fueron atacadas con bombas 5 iglesias cristianas en los territorios palestinos.

El Papa no habló de manera directa, sino que comunicó su pesar por el episodio mediante el flamante secretario de Estado vaticano, Tarcisio Bertone. El Sumo Pontífice "lamenta intensamente que algunos pasajes de su discurso puedan haber sonado como una ofensa de los sentimientos de los fieles musulmanes", dijo Bertone en Roma. Los pasajes "fueron interpretados de manera diferente a la intención" del Papa, añadió el alto portavoz, que destacó en su explicación el afecto de su superior hacia el islam y su disposición a un diálogo entre religiones.

El martes pasado, durante un discurso pronunciado en la ciudad alemana de Regensburg ante un público académico, Benedicto XVI citó un diálogo de 1391 entre el emperador bizantino Manuel II Paleólogo con un erudito persa sobre el cristianismo y el islam. "Muéstrame lo nuevo que ha traído Mahoma y ahí sólo encontrarás cosas malas e inhumanas, como haber ordenado difundir con la espada la fe que predica. A Dios no le gusta la sangre", dijo el emperador en el siglo XIV, lo que fue citado por el Pontífice.

Con los días, las palabras de Benedicto provocaron la indignación en el mundo musulmán, donde se pidió que se disculpara o retirara sus declaraciones. Pero ese discurso "terminó con un claro y radical rechazo de toda violencia por motivos religiosos, venga del lado que venga", aseguró el comunicado leído por el secretario de Estado vaticano.


Voces moderadas
Tras las duras críticas del jueves y viernes, ayer se escucharon también voces moderadas en el mundo islámico. El diario turco Hurriyet reprochó al máximo jefe de la autoridad religiosa turca, Ali Bardakoglu, que no conocía de primera mano el discurso del Papa cuando le exigió que se disculpara. Bardakoglu se felicitó ayer tras el comunicado del Papa. "Dice que respeta al islam y no quiso ofender los sentimientos de los musulmanes. Para mí eso es una actitud civilizada", dijo el líder religioso.

Sin embargo, el premier turco, el islámico moderado Recep Tayyip Erdogan, exigió una disculpa de Benedicto XVI. El dirigente consideró indispensable que el Papa se retracte de sus "falsas, odiosas y desafortunadas" palabras y se disculpe ante los musulmanes. Erdogan habló antes de que se conociera el comunicado del Papa. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, un radical extremista conocido por su antisemitismo abierto, pidió se realice un análisis de especialistas islámicos. "Las observaciones deberían primero ser analizadas por teólogos y científicos islámicos", citó la televisión estatal a Ahmadineyad, que se encuentra actualmente en la cumbre de Países No Alineados en La Habana. Ahmadineyad calificó al islam como una "religión pacífica, bonita y perfecta".

En cualquier caso, la furia no parece ceder. En el mismo Irán, el portavoz del Ministerio del Exterior, Mohammed-Ali Hosseini, dijo que para evitar malentendidos en el mundo musulmán, el Papa debería aclarar cuanto antes su posición frente al islam y la violencia. "Con ello podría reinstaurarse la solidaridad entre las religiones", advirtió.


Iglesias bajo fuego
El partido palestino radical Hamas acusó al Papa de querer "dar un respaldo religioso a Estados Unidos en su guerra en la región y quizá en nuevas agresiones y guerras". En la ciudad de Nablús, en Cisjordania, se produjeron ataques incendiarios contra una iglesia anglicana y otra griego-ortodoxa, reivindicados por un grupo radical islámico en respuesta a las palabras de Ratzinger. Ayer hubo nuevos ataques, con bombas incendiarias, en Cisjordania y Gaza, sumando cinco los templos cristianos agredidos desde el viernes. Se temía que durante la noche pudiera haber nuevos asaltos violentos a las iglesias. El integrismo islámico es predominante actualmente en el campo palestino, con Hamas figurando como primera fuerza política. Esta agrupación es un desprendimiento palestino de la radical Hermandad Musulmana egipcia.

En el mismo sentido se expresaron los talibán en Afganistán, que calificaron las declaraciones del Papa como "una extensión de la cruzada del presidente estadounidense Bush contra el islam".

En Roma se espera que Benedicto vuelva a manifestarse sobre el tema hoy, tras el rezo del Angelus en su residencia de verano de Castel Gandolfo, a las afueras de Roma.

Una iglesia evangélica agredida con bombas molotov en Nablús.