Baldomir: "No me voy a marear"

"Hago una, dos o tres peleas más y me retiro", dijo el santafesino pocas horas después de obtener la corona desde Los Angeles

Lo trataron de loco, pero no hizo caso. El tomó la decisión de desechar una chance mundialista esperando una mejor oportunidad. Y eso que enfrente un buen campeón como el mexicano Antonio Margarito le hubiera dado chapa. Esperó, más allá de que su edad, 34 años, le indicaba que no tenía tanto hilo en el carretel. Pero la paciencia es un don de los sabios, dicen, y Carlos Manuel Baldomir supo exprimirla al máximo para coronarse campeón mundial welter del Consejo Mundial (CMB) y la Asociación Mundial del Boxeo (AMB). Este santafesino, pausado y medido en sus palabras, hizo lo que ningún argentino pudo jamás: coronarse en esa categoría y en el mítico Madison Square Garden.

En el elixir de su gloria, sin embargo, no despega los pies sobre la tierra, como se manejó siempre, sobre todo en estos últimos años donde planificó su vida con objetivos bien claros. Por eso, le confesó a Ovacion desde Los Angeles, adonde arribó el domingo por la noche tras su fantástica victoria en Nueva York ante el local de Brooklyn Zab Judah, que "hago una, dos o tres peleas más y me retiro". Y de la misma manera está seguro que "sabré como manejar este momento y no me voy a marear".

A su edad quiso dejar claro que sabe perfectamente lo que quiere y así lo plasmó en una charla con tiempo, pese a que recién arribaba al estado de California, que dejará mañana para regresar a la Argentina el miércoles.

-¿La alegría supera cualquier cansancio que aún debés sentir, no?

-Seguro que sí. Estoy muy contento por lo que logré y porque sabía que estaba en condiciones de ganar. Siempre me tuve confianza porque hice todo lo que tenía que hacer.

-¿Sabías la fiesta que desataste en Santa Fe?

-Me comentaron eso, que fue una fiesta, principalmente en Santa Fe pero también en el país. Me pone feliz haber provocado eso.

-¿En qué momento supiste que la pelea la podías ganar?

-Creo que a partir del cuarto round. De los tres primeros, dos seguros fueron de Judah, pero el cuarto lo gané muy claro y supe que podía seguir sumando puntos. Lógicamente, el séptimo fue mi mejor momento y ahí sabía que la pelea estaba a mi favor.

-¿Qué pasó? ¿No pudiste noquearlo o el árbitro lo ayudó a Judah?

-No, no me pareció que lo haya ayudado, al menos yo no me dí cuenta para nada. Otros también me dijeron que el árbitro se interpuso pero simplemente no pude noquearlo. Igual, ahí supe que la pelea estaba a mi favor.

-¿Tenías tan claro que tu plan de pelea era el acertado? Dijiste que si iban hasta los doce round era tuya.

-Es que yo lo tenía bien visto, lo estudié mucho. Judah empieza siempre bien los primeros round pero cuando la pelea se hace larga retrocede mucho. Sabía que si lo presionaba a partir de ahí lo podía ganar.

-Los expertos dijeron que te subestimó. ¿Lo viste así?

-No creo que me haya subestimado. Lo que ocurrió es que sabía que tenía después de mí un compromiso muy grande (contra el también estadounidense, el tricampeón de los ligeros Floyd Mayweather, invicto en 13 peleas mundialistas) y quizás por eso dijo que me iba a noquear rápido, que me daría treinta segundos de fama.

-¿Y estabas seguro de que habías ganado antes de que leyeran las tarjetas?

-Estaba confiado, seguro. Terminé la pelea sabiendo de que había ganado.

-Pero no le tenías miedo al jurado, que en estas circunstancias siempre tira para el campeón y más cuando el defensor de la corona es local.

-No, porque me habían dicho que la comisión de boxeo de Nueva York era muy limpia y que sus fallos eran justos. Por eso no estaba nervioso en ese aspecto y confiaba en que me darían por ganada la pelea.

-¿El Madison Squarde Garden no llegó a encandilarte con su fama? ¿Te pudiste abstraer de esa magnificencia?

-Me hablaron mucho de lo que significaba pelear ahí y sabía por supuesto la importancia que tenía. Pero no me pareció tanto y estuve siempre muy concentrado. Sí sé que pude lograr lo que ningún argentino hizo, ganar en el Madison un título mundial y en welter, donde tampoco nadie había ganado.

-¿Y qué viene después?

-Ahora quiero disfrutar este momento y después pensar en la próxima pelea, a lo mejor con Mayweather. Igual, haré una o dos peleas más, seguramente con una muy buena bolsa, y con eso será suficiente. A mi edad estoy bien entero pero ya cuesta mucho entrenar y creo que será la decisión correcta.