Pichincha se viste otra vez de rock y maquillajes

Kissmanía presenta hoy su tributo en Willie Dixon

Los muchachos con las caras pintadas vuelven a invadir Pichincha, tal cual lo hicieron varias noches de los últimos tiempos. Kissmanía vuelve hoy, a las 22.30, a Willie Dixon, Güemes y Suipacha, con su "Tributo a Kiss". El grupo es la versión rosarina de Gene Simmons, Paul Stanley, Ace Frehley y Peter Criss, la megabanda neoyorquina que vendió 75 millones de discos en más de 30 años de trayectoria .

Los Paul, Gene, Ace y Peter rosarinos recrean meticulosamente el show en vivo de Kiss, la banda que en los 70 y 80 lograron un masivo éxito gracias a una fuerte imagen emparentada con el glam y la fuerza musical del heavy rock.

"Todo comenzó en diciembre de 2004 -recuerdan Ace y Peter- cuando decidimos, después de unos cuantos años de militancia en el rock and roll, formar una banda tributo a Kiss. Esta decisión estuvo más que nada fundamentada en que ambos éramos amigos desde la adolescencia gracias al fanatismo por Kiss".

La tarea, según el grupo, no fue nada fácil. "Empezar a trabajar en la formación de este tributo fue complejo, ya que para hacerlo correctamente había que juntar cuatro figuras que coincidieran lo más posible con los originales".

Lo primero que se plantearon los artistas de Kissmanía fue recrear al Kiss de los 70 y primeros años de la década del 80. Es decir, la formación original de la banda neoyorquina.

Así fue como Ace y Peter (imposible sacarles el verdadero nombre) ya ganaron su lugar en este tributo. Luego se decidieron por el nombre, Kissmanía. Después salieron a buscar a un Paul y a un Gene. Formado el cuarteto, a fines de 2004 comenzaron los ensayos. "Sacamos de entrada un repertorio de 20 temas, aproximadamente, de los más representativos de Kiss", recordaron. A comienzos de este año el bajista Gene tuvo que ser reemplazado.

Más allá de la lista de temas y los largos ensayos, todo tributo debe contar con una fuerte apuesta en lo escénico. Y los miembros de Kissmanía lo sabían desde el comienzo. Kiss fue una banda polémica, ruidosa, espectacular, controvertida y criticada. Se la acusó de satánica, violenta y sin talento. Pero, tal vez, son esas mismas razones las que hicieron que tengan miles de fans en todo el mundo. "Kiss es también muy fuerte en lo visual -acotaron-. Sus fans no se conforman con lo musical, por lo cual tuvimos que pensar además en lo escénico. Así, empezamos a trabajar en los trajes y en los maquillajes, así como en los instrumentos que ellos utilizaban y que eran bastante peculiares".

Finalmente, los Kissmanía enumeraron: al término de ocho meses de ensayo, el proyecto estaba listo para ser lanzado. "Realizamos una sesión fotográfica y una grabación de «Love Gun»". Así comenzó la historia de Kissmanía, que este año empezó la conquista de Rosario a partir de Pichincha.

Kissmanía hacen su homenaje a "los caras pintadas" del rock estadounidense.