Inesperado. El cantante vive con asombro el éxito de su tercer disco, "Esta mañana y otros cuentos".

Coti Sorokin: "Hay que mostrar música hecha por tipos con sangre, no por máquinas"

El compositor nacido en barrio Echesortu anunció una gira que lo traerá a su ciudad el año que viene

U. G. Mauro / La Capital

"Siempre me gustó y admiré a los que demostraron desprejuicio y enriquecieron su música con distintos géneros", explicó a La Capital el compositor y cantante rosarino Coti Sorokín, quien, radicado en España, regresó al país para promover su tercer disco "Esta mañana y otros cuentos", una placa grabada en vivo en la que participaron, entre otros, los cantantes Paulina Rubio, Julieta Venegas e Ismael Serrano.

-¿Qué repercusiones tuvo tu disco?

-Realmente estoy sorprendido por lo que está pasando en España con esto, que ya lleva vendidos más de 100 mil ejemplares. Es algo totalmente inesperado para mí. Allá estoy haciendo una gira por la que ya ando por los sesenta y pico de conciertos, lo que nos quita poder venir por bastante tiempo a la Argentina, así que lo pensamos como para el 2006. Voy a andar por Buenos Aires, Rosario, Mendoza, Córdoba y Entre Ríos.

-¿Qué evaluación hacés sobre este nuevo trabajo?

-Es un resumen de lo que fui desarrollando en España desde hace cinco años. Se puede entender como una continuación de los dos discos anteriores. Lo hicimos en vivo para darle una segunda oportunidad a algunas canciones que, creo, no habían dado lo que tienen para dar.

-¿Cuál es para vos el valor de un disco en vivo?

-Creo que cada disco tiene su valor: el primero fue más solitario e íntimo; el segundo fue con mi banda y se grabó aquí en el estudio de Fito (Páez). El disco en vivo se motivó en la idea de retomar la escencia de las canciones despojándolas de los arreglos, lo que por ahí refleja de manera espontánea lo compositivo. Este, particularmente, está hecho en dos horas. El estudio te da la posibilidad de rehacer, rearmar y tanto te da posibilidades como te quita autenticidad. Otra ventaja del disco en vivo es que te enseña a vivir con las imperfecciones: hay que mostrar música hecha por tipos con sangre, no por máquinas.

-Musicalmente naciste en el rock ¿hoy estás lejos de los encuadramientos?

-Me siento músico y no quiero ponerme barreras. Siempre me gustó y admiré a los que demostraron desprejuicio y enriquecieron su música con diferentes géneros: Fito, Charly, Calamaro, Spinetta, gente que se mantuvo al margen de las definiciones.

-Después de tanto tiempo, ¿qué quedó en tu música de tu paso por Rosario y por Luz Mala?

-Con varios de los músicos sigo en contacto, con Javier Allende, con Sandra Corizzo... Fue una etapa muy importante, de mucho aprendizaje en la que me sentía como una esponja, absorbiendo y estudiando toda la música que me llegaba, Luz Mala fue un fiel reflejo de esa etapa.

-¿El hecho de ser el autor de "Color Esperanza" ejerció alguna influencia en tu carrera en España?

-En realidad, allá el tema no tuvo la repercusión que alcanzó en Latinoamérica. Ni tampoco todo el mundo sabe que fui yo el que la compuso. Llegué a España siendo un desconocido y empecé un trabajo desde cero. Allá empecé tocando en barcitos.

-Barrio y cuadro de Rosario

-Soy de barrio Echesortu y de una familia muy dividida entre leprosos y canallas, en la que yo salí simpatizante de Central.

Coti Sorokin reunió a Paulina Rubio, Julieta Venegas, Ismael Serrano y Josemi Carmona en la grabación de su última placa.