Un albañil estuvo preso por dos crímenes y era inocente

Un albañil que estuvo preso más de un año, acusado de haber cometido dos asesinatos en el partido bonaerense de La Matanza, fue liberado tras una rueda de presos en la que no fue reconocido por el hijo de una de las víctimas, considerado un testigo clave a pesar de que tiene nueve años, informó hoy el abogado defensor del hombre.

Se trata de Inocencio Ariel Brítez, un joven de 32 años que está casado y con dos hijos, quien salió el viernes pasado en libertad luego de haber estado alojado en comisarías y cárceles bonaerenses desde junio de 2004.

Pablo Aiello, abogado de Brítez, informó que todo comenzó en cuando la esposa de su cliente estaba embarazada de su segundo hijo y el hombre necesitaba trabajar para conseguir dinero.

Brítez, oriundo de la provincia de Misiones y que vivía en La Matanza, consiguió un trabajo de albañilería en una vivienda en la villa Palito, localidad de San Justo, en el mencionado partido al oeste del Gran Buenos Aires.

Según el abogado, el 11 de junio de 2004, Brítez llegó a trabajar y al cabo de unos minutos, alrededor de las 8.15, varios policías realizaron un allanamiento en dicha vivienda y se lo llevaron detenido.

Es que unos cinco días antes, un hombre llamado Tomás Orlando Sánchez Prieto había sido asesinado de seis balazos y su cuerpo fue introducido en el baúl de un Ford Falcon que apareció en una calle de La Matanza.

De acuerdo con la investigación, el hijo de nueve años de la víctima había dicho que la casa de villa Palito era el último lugar donde había visto con vida a su padre.

Los policías allanaron la vivienda y hallaron una pistola calibre 3.80 y una Colt modelo 1937 por lo que Brítez fue detenido por el delito de tenencia de armas, junto a otros tres albañiles de nacionalidad paraguaya que se encontraban con él. (Télam)