Humberto Primo al 2400

Una escuela de Ludueña, indefensa ante los robos

Sufrió siete atracos en lo que va del año, sin que la seccional 12ª ubique a los delincuentes

La escuela particular número 1027, ubicada en Humberto Primo al 2400, sufrió antenoche el séptimo robo en lo que va del año. Medicamentos, ropa y alimentos fueron a parar a manos ajenas luego de que un grupo de ladrones se introdujo al establecimiento y, además de llevarse cosas de valor para los más de 800 chicos que concurren allí, causaron destrozos en dos oficinas.

La escuela, enclavada en el corazón de barrio Ludueña, fue asaltada en horas de la madrugada. El robo se descubrió cuando una de las porteras llegó ayer antes de las 7 para abrir el establecimiento. Los ladrones se introdujeron por una ventana, de la cual desprendieron una reja completa, y luego destrozaron dos puertas, una de las cuales comunica con un cuarto donde estaban almacenados víveres y mercaderías cedidos por Cáritas.

"No hago más denuncias, no voy más a (la seccional) 12ª, ni a Tribunales. Si quieren pistas sobre los ladrones que los busquen ellos. ¿Yo les tengo que dar las pistas, decirles dónde están las cuevas", afirmó la directora, Ana Solhaune, quien a pesar de esas palabras no quiere resignarse frente a tanta inseguridad que se respira en el barrio. La escuela está situada en una zona de villa de emergencia, que además de presentar una pobreza extrema es azotada por el delito.

"No podemos poner a todos en la misma bolsa, porque aquí hay cuatro o cinco focos de delincuencia en un barrio donde viven 100 mil personas. Es injusto culpar a la pobreza porque aquí, en la villa, he encontrado muestras de solidaridad que no encontré en otros lugares. Pero lo cierto es que hay mafias que utilizan a la gente del barrio para robar", sostuvo la docente, muy enojada.

La directora pidió que el episodio de antenoche no quede como algo focalizado en el delito solamente y exigió a las autoridades competentes que investiguen y por una vez aclaren un robo.