Año CXXXVI Nº 48198
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
El Mundo
Opinión
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Salud
Autos
Escenario


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 02/11
Mujer 02/11
Economía 02/11
Señales 02/11
Educación 01/11
Campo 01/11


contacto

servicios

Institucional

 miércoles, 05 de noviembre de 2003

Inseguridad. La policía se preocupó en aclarar que no había efectivos implicados
Liberaron a Pablo Belluscio
Después de 43 días, los captores dejaron ir al joven estudiante al que le habían cortado dos falanges

Pablo Belluscio, el joven estudiante que estuvo secuestrado 43 días, fue liberado ayer en la localidad bonaerense de Benavídez luego de que su familia pagara un rescate de 100 mil pesos, y por el caso fueron detenidos cinco hombres y dos mujeres, según fuentes judiciales y policiales. El muchacho apareció a las 5 de ayer, según la policía, que no dio precisiones sobre si se pudo recobrar o no el dinero pagado por la familia.

Así se resolvió felizmente uno de los más resonantes secuestros de los últimos meses, que motivó un espontáneo e importante cacerolazo el viernes pasado, y hasta derivó en una fuerte polémica política sobre las causas y los responsables de la ola de delitos de ese tipo.

Belluscio, de 25 años, a quien los secuestradores le habían cortado dos falanges del dedo índice de la mano derecha, como advertencia a sus familiares sobre su determinación a seguir dañándolo si no se pagaba el rescate, apareció ayer a las 4.30 en una remisería de la localidad bonaerense de Garín, partido de Escobar.

Poco después, la policía bonaerense de San Isidro, en una decena de allanamientos, detuvo a siete personas presuntamente implicadas en el caso, con antecedentes policiales y posiblemente responsables de otros secuestros similares, aunque la policía cree que hay más involucrados en los hechos.

A las 2 de la mañana, un familiar había abordado un tren de la línea Belgrano Sur, llevando unos cien mil pesos dentro de un bolso, que luego arrojó cuando el convoy estaba en marcha, desde una ventanilla al acercarse a la estación de Isidro Casanova, tal cual lo habían exigido los secuestradores.

En evidente contacto permanente con los familiares, la policía de San Isidro puso en marcha un enorme operativo de allanamientos en el que se dio con los presuntos responsables.

Patrullas de las fuerzas de seguridad operaron en las villas de emergencia La Cava y San Carlos, de San Isidro, y también hicieron operativos en Don Torcuato, el Talar de Pacheco, de Tigre y en Benavídez.

Con la policía de San Isidro colaboró la Side en las investigaciones, se confirmó oficialmente.

En uno de los hechos hubo un tiroteo, sin heridos, que terminó con la detención de algunos de los presuntos implicados.

El gobernador bonaerense Felipe Solá dijo que en principio no había policías vinculados con la banda.

En la jornada de ayer se siguieron realizando distintos operativos en busca de más ramificaciones de la banda, que según la fiscal Rita Molina, estaría también relacionada con otros secuestros importantes.

El joven estudiante de biología en la Universidad de Buenos Aires se encontraba en "buen estado de salud", según confirmó la fiscal Molina, que interviene en el caso. Dijo que incluso sus captores, a raíz probablemente de la amputación de dos de sus falanges, le aplicaron una vacuna antitetánica.

El muchacho, tras el reencuentro con sus familiares, fue derivado a una clínica de la Capital Federal para ser sometido a una profunda revisación médica.

Mientras, se aguardaba que los detenidos prestaran declaración a la Justicia.


Calvario
Pablo fue secuestrado el 22 se setiembre a la 0.30 por una banda de ocho delincuentes cuando se retiraba de la cancha de hockey Perú Beach, de Martínez, tras terminar su entrenamiento.

El movimiento de extraños armados alertó a un custodio privado de la zona que avisó a la comisaría local, sin saber que se trataba de un secuestro extorsivo, por lo que partió hacia el lugar indicado una patrulla para averiguar qué ocurría.

Cuando los captores advirtieron la presencia de policías comenzaron a dispararles con fusiles hasta herir a dos de los efectivos, tras lo cual huyeron y nunca más se supo de ellos.

Días después comenzaron lacónicos llamados telefónicos en los que se exigía una suma altísima de rescate, que los padres del chico aseguraron que no podían pagar.

Mientras estuvo secuestrado, a Belluscio le cortaron dos falanges del índice de la mano derecha, y los secuestradores enviaron a la familia un video donde mostraban cómo torturaban a la víctima. (Télam y DyN)

enviar nota por e-mail

contacto
buscador

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
La policía detuvo a siete personas.

Notas Relacionadas
Un mozo lo ayudó

Alivio del gobierno bonaerense por el feliz desenlace


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados