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 miércoles, 30 de julio de 2003

Embestida del ministro por efectivos sospechados de ser secuestradores
Cafiero dijo que investigará el patrimonio de todos los policías
Calificó de "porquerías" a los uniformados que, ganando mil pesos por mes, viven en barrios privados

El ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, calificó ayer a los policías que están prófugos -acusados de participar de secuestros-, de "delincuentes con uniforme, que merecen el peor de los castigos". "Estos delincuentes con el uniforme de la policía están haciendo un daño terrible a la comunidad y derrumban el trabajo que se venía realizando. Estos delincuentes con uniforme no merecen otra cosa que el peor de los castigos, el castigo de la ley y de sus propios compañeros que los buscan para meterlos presos", dijo.

Cafiero se refirió en estos términos cuando lo consultaron sobre el caso de diez policías bonaerenses de una brigada antisecuestros que están prófugos acusados de capturar a un hombre para liberarlo por un auto y 48 mil pesos.

Asimismo, el ministro agregó que "ahora todos los policías van a ser investigados y deberán presentar su declaración jurada y al que agarre en la más mínima infracción, va a pagar las consecuencias junto a su superior".

Calificó de "porquería" a los policías que, ganando mil pesos, viven en un country. Dijo que esa situación "es para sospechar, para condenar, son delincuentes que se enriquecieron con el uniforme, que aprovecharon la circunstancia de ser representantes de la ley para violarla y hacer su fortuna personal".

Afirmó que "no va hacer purgas generalizadas ni caza de brujas" y explicó que "las purgas sirvieron para generar esta situación, donde hubo castigos en general y no se premió a los buenos policías. Yo no hago purga, pero al que agarremos en la más mínima infracción, él y su jefe inmediato pagarán las consecuencias. Porque es ingenuo pensar que hay alguien que está haciendo algo y el que está arriba, el superior inmediato, no sabe nada o mira para el costado y lo deja pasar".

"Los premios y castigos también van a ir para arriba. Guarda que no estamos hablando de una cuestión menor, donde un suboficial o un oficial de baja graduación hace algo. Nosotros no somos tontos ni creemos que sus jefes ignoran lo que pasa", dijo.

Señaló que "la gente se siente amenazada por la ola de inseguridad, pero no siente confianza en quien la tiene que proteger" y añadió que "así es difícil avanzar contra el delito y el delito saca ventaja y mueren o son violadas en su propiedad o en su dignidad personas indefensas, ciudadanos que son trabajadores y decentes".


No aparece
Anoche, la Bonaerense continuaba con la búsqueda del subcomisario José Alberto Hernández -de esa fuerza-, que estaba a cargo de la Dirección de Investigaciones Complejas y Narcocriminalidad de Lomas de Zamora, sospechado de liderar un grupo de efectivos que hace un año habría privado de la libertad a un comerciante con fines extorsivos.

El subcomisario buscado participó de las investigaciones por el secuestro del chico del Jagüel, Diego Peralta, cuyo cadáver apareció en una tosquera de Berazategui el 8 de julio del 2002.

Otros nueve policías integrantes de la División Narcocriminalidad y Delitos Complejos, de Lomas de Zamora, fueron puestos en disponibilidad al estar sospechados por la Justicia, por haber detenido en su domicilio en abril último a un empresario de la zona sur del conurbano, a quien habrían exigido la suma de 150 mil pesos para dejarlo "fuera de la causa" y en libertad.

Sospechados por el hecho fueron detenidos los suboficiales Osvaldo Lorenzón, José Alberto Hernández, Pedro Oscar Mendiola, Benito Bruno, Héctor Díaz y el principal Oscar Rubén Herber.

Pero, tras hacerse el reconocimiento fotográfico en sede Judicial, la víctima, presuntamente por temor no reconoció como sus captores a ninguno de los seis policías antes nombrados.

A mediados de mayo, con el objeto de recabar más pruebas para la causa, la Fiscalía procedió a requisar con peritos la casa de la víctima, donde habrían hallado infinidad de huellas dactilares, las cuales luego de ser cotejadas resultaron ser comparables con las de los seis policías que habían quedado en libertad y también con las del subcomisario Hernández y los policías Adrián Tocci, De Santis y Daniel Cayo.

Aún se encuentran prófugos el subcomisario Hernández, los oficiales principales Tocci, y Carlos De Santis. (Télam)

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"El infractor pagará las consecuencias".

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