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viernes,
30 de
noviembre de
2007 |
Tres balazos calibre 38
Los investigadores del crimen de Abel Beroiz confirmaron que los balazos recibidos por el dirigente camionero fueron realizados con un revólver calibre 38, una poderosa arma de guerra. A esa conclusión llegaron tras analizar los restos de proyectiles hallados en el estacionamiento subterráneo del ACA, lugar donde el martes asesinaron al sindicalista de tres disparos y varias cuchilladas.
Asimismo, los voceros sostuvieron que a partir de los testimonios recogidos en la causa se tratará de hacer un fotofit que permita dar con los homicidas. Sin embargo esa tarea no parece algo fácil porque no todos los testigos pudieron aportar datos fisonómicos muy fehacientes.
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