Una fiscal pidió el desalojo del piquete de la CCC en pleno centro

La fiscal Nº10 de los Tribunales provinciales de Rosario, María Rita Schiappa Pietra, solicitó ayer al juez correccional Juan José Alarcón que ponga fina a la protesta con corte de calle que desde hace más de una semana militantes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) mantienen en Mendoza entre Maipú y Sarmiento. A modo de respuesta, los manifestantes decidieron volver a flexibilizar la medida, que desde hoy será de 9 a 15.30.

Schiappa Pietra cursó su pedido en base a la denuncia presentada por un grupo de vecinos y argumentando que los manifestantes, a través de la medida de protesta frente a la sede de la Gerencia de Empleo de la Nación, están cometiendo “algunos delitos”.

La fiscal pidió al magistrado la identificación de los militantes “para que luego vengan a declarar”. Y reconoció haberle solicitado a Alarcón “que intervenga y desaloje, aunque él debe decidir si las medidas son viables o no”.

Cronología.
Hace más de siete días habitantes de diversos barrios agrupados en la CCC y en los Pueblos Originarios instalaron un campamento en Mendoza al 900 para reclamar asistencia social por las fiestas de fin de año.

Eduardo Delmonte (CCC) explicó que la demanda incluye la conformación de una comisión de trabajo y viviendas populares (20.000 unidades) y la reconversión de planes asistenciales en “empleos sociales” remunerados.

Además, el dirigente anunció la flexibilización de la protesta: “El corte de calle será sólo entre las 9 y las 15.30. Luego liberaremos el tránsito”.

La CCC también pidió audiencias al Arzobispado y al Concejo Municipal para solucionar el conflicto.

El fin de semana pasado los manifestantes habían acordado con los comerciantes de la zona el levantamiento del piquete y la consiguiente libre circulación de vehículos.

Pero la frágil tregua duró hasta el lunes, cuando los vecinos y un grupo de comerciantes (molestos por la pérdida de clientes) volvieron a expresarse en contra del acampe.

Por su parte, Schiappa Pietra precisó los delitos que les endilga a los manifestantes. “No sólo se obstaculiza el tránsito, al no dejar pasar autos ni colectivos, sino que quienes viven en la zona no pueden salir porque estas personas duermen, comen y hacen sus necesidades en la calle”, resumió la fiscal, que también habló “casas vecinas que tienen arruinados sus frentes”.