Tras un accidente, lo culpan por la muerte de un niño

Un automovilista fue condenado a dos años y medio de prisión y a una inhabilitación especial de cinco para años para conducir cualquier tipo de vehículo al ser declarado culpable de la muerte de un chico de 11 años que fue atropellado cuando se encontraba sobre el cantero central de bulevar Oroño. La pena es de aplicación condicional, es decir que el acusado no irá a la cárcel porque el delito que cometió (homicidio culposo) es excarcelable y porque no posee antecedentes penales.

El accidente ocurrió el 13 de abril de 2006, a las 18.20, en bulevar Oroño al 4100. El hombre ahora condenado conducía una camioneta Peugeot 504. Según la reconstrucción de la Justicia, el chofer se desplazaba por esa avenida en dirección sur-norte. De acuerdo a lo que declaró en su momento, el hombre perdió el control del vehículo cuando fue sorprendido por una mala maniobra de otros autos.

Según su declaración, en ese momento su vehículo fue tocado por otro coche, lo que le hizo perder el dominio de su rodado. Así la camioneta ascendió las dos ruedas del lateral izquierdo sobre el cantero central de la avenida y embistió de lleno contra una señal de tránsito que terminó por golpear en la cabeza al chico, causándole la muerte en forma inmediata.

El juez Correccional Nº 8, Edgardo Bistolleti, al momento de dictar sentencia no hizo lugar a la versión del imputado, en el sentido de que no fue responsable directo del accidente al ser tocado desde atrás por otro vehículo.

“Si hubo toque o roce con algún otro coche, fue mínimo, pero la conducta imprudente e imperita desarrolló una velocidad inadecuada, lo que no le permitió llevar a cabo ningún tipo de maniobra que evitara la colisión”.

El conductor puede presentar una apelación para que el fallo sea revisado.