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miércoles,
17 de
octubre de
2007 |
La destacada: Levantarse y seguir
Cuando leo que chicos mueren por inhalar pegamento y son internados, pienso en la importancia de un tutor, como en el crecimiento de las plantas. Un tutor es el sostén, la contención para que esa plantita germine y siga su crecimiento paralelo, pero con independencia y con fuerza, derecho hacia arriba buscando los tibios rayos del sol. A veces es la familia, a veces asociaciones como Avida, a quienes agradezco la oportunidad que dieron a mi hijo de participar en un certamen de natación de gente con "capacidades diferentes". En una de las remeras un familiar tenía inscripto: "Lo importante no es caerse, sino levantarse y seguir adelante". Es allí cuando uno toma conciencia de la solidaridad, de la fuerza que toda esta gente (discapacitados motrices, visuales, down) hace para llegar a una meta. Lo importante de chicos que, después de participar y con gran esfuerzo, van saltando en su única pierna para compartir su alegría y sus logros con sus familiares y amigos. Por eso no entiendo cuando gente que tiene todas sus capacidades intactas estacionan en un lugar para discapacitados por no caminar una cuadra de más, sin pensar en lo importante, que es respetar y valorar a personas, quizás con más capacidades, aunque disminuidos físicamente. Si bien es muy compleja toda la problemática social en la que están inmersos aquellos chicos que tronchan su vida con drogas, ellos necesitan que las reparticiones públicas les proporcionen una meta, ganas de lograr algo y sentirse respaldados. Nuevamente gracias a Avida, a Leandro y a Cecilia, por acompañar junto con nosotros el crecimiento de nuestro hijo.
Silvia Buonamioco
[email protected]
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