Ahmadineyad: "Israel es un insulto a la dignidad humana”

El presidente islamista volvió a dudar del Holocausto y pidió el “traslado” del Estado judío

Teherán. — El presidente iraní Mahmud Ahmadineyad afirmó ayer, durante una conferencia en la Universidad de Teherán, que la existencia de Israel es un “insulto a la dignidad humana”, en una jornada en que miles de iraníes marcharon contra el control israelí de Jerusalén. Ahmadineyad, un negador del Holocausto, ha dicho repetidamente que el Estado judío debe ser “borrado del mapa”. Ayer, viernes de rezos en el mundo islámico, el presidente iraní volvió a la carga con la idea: esta vez propuso que Israelse mude a “Canadá o Alaska”.

“La creación, la existencia y el apoyo ilimitado a este régimen (por Israel, a la que nunca nombra directamente), es un insulto a la dignidad humana”, manifestó Ahmadineyad. “La ocupación de Palestina no se limita a un territorio. El problema sionista es ahora un problema global” aseguró.

En Teherán, cientos de miles de personas —según cifras oficiales del régimen islámico— salieron a la calle y pidieron a gritos “muerte a Estados Unidos” y “muerte a Israel”. El fundador del régimen islámico iraní, el ayatolá Khomeini, instauró el “día de Jerusalén” cada último viernes del mes santo del Ramadán.

Irán no reconoce a Israel su derecho a la existencia, y considera que Palestina abarca todo el Estado judío. Si bien esta es la doctrina oficial iraní desde la revolución de 1979, el tono antisemita de Teherán se disparó con la llegada al poder en 2005 de Ahmadineyad, un extremista islámico de la línea más dura. La negación de un Estado de Israel, reconocido por Naciones Unidas —se formó en 1948 en cumplimiento de una resolución de la ONU del año anterior— y el llamado reiterado a su destrucción resultan violatorias de la Carta de la ONU, denuncian israelíes y estadounidenses.

Antecedentes. Ahmadineyad ya ha pedido en el pasado “borrar del mapa” a Israel, y también ha manifestado que el Holocausto es un “mito” utilizado para crear a Israel. Ahmadineyad llegó incluso a realizar una conferencia revisionista sobre el Holocausto en Teherán, a la que invitó a “historiadores” neonazis.

Pero ayer el presidente iraní volvió con otro de sus temas predilectos: la “mudanza” de Israel. “Canadá y Alaska tienen grandes territorios. ¿Por qué no lo reubican (a Israel) ahí y lo mantienen con 30.000 ó 40.000 millones de dólares por año para que construya una nueva existencia?”, propuso de manera insólita Ahmadineyad. “Pregunté a Europa y a Estados Unidos si estaban de acuerdo en dividir su territorio y devolverle (a Israel) una parte de él”, agregó el mandatario, que hace dos años ya propuso “alejar Israel del mundo islámico” creando un Estado judío en suelo alemán o austríaco.

“Pretexto”. Ahmadineyad también afirmó ayer que el Holocausto no debía representarse como “un asunto santo, más santo que Alá y los profetas” y como “un pretexto para iniciar otro genocidio contra Palestina”. La nación iraní, agregó, condena el asesinato de cualquier pueblo inocente, sin importar si se trata de musulmanes, cristianos o judíos, y considera “criminales” a Hitler y demás responsables de la Segunda Guerra Mundial. Pero acto seguido volvió a pedir la creación de una comisión internacional para “esclarecer la dimensión real” del Holocausto. Los historiadores serios responden que el Holocausto es uno de los hechos mejor documentados de la historia humana. Ahmadineyad reiteró otra de sus ideas: que un “referéndum libre” defina la cuestión palestina.