|
domingo,
23 de
septiembre de
2007 |
Enormes diferencias
Adelfa, la futura esposa, es jubilada docente. Se desempeñaba como maestra de chicos discapacitados.
Mientras tanto, Reinaldo logró culminar el ciclo secundario cursando en el horario nocturno, y ahora se dedica a acompañar a su novia y cuidarla. “No pude terminar la escuela porque tuve a mi madre enferma durante mucho tiempo y debí hacerme cargo de su salud”, explicó.
Preocupado por lo que muchos podrían llegar a pensar, el joven insistió en una cuestión que considera clave: “No estoy interesado en el patrimonio de Adelfa, como seguramente deducirá mucha gente”.
enviar nota por e-mail
|
|
|