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domingo,
23 de
septiembre de
2007 |
Café Tacuba no defraudó en otra jornada del Pepsi Music
Buenos Aires.- Los mexicanos de Café Tacuba desplegaron nuevamente en la noche porteña su talento, clase y diversidad sonora al cerrar la segunda jornada del Pepsi Music, ante unas 20 mil personas.
Rubén Albarran, Emmanuel del Real, Joselo y Quique Rangel se apoderaron de la segunda jornada de la máxima cita rockera para hacer bailar, saltar y emocionar a un público que los aprecia y los hace sentir locales desde hace varios años.
A quince días de lanzar su nuevo disco, “Sino”, los Tacuba desembarcaron en Buenos Aires, el jueves vieron el regreso de Soda Stereo y anoche volvieron a actuar ante el público local.
La mención a Soda Stereo no es menor, ya que los argentinos supieron ser la banda más importante de rock latino durante la última parte de los 80 y hasta el 97, un cetro que hoy, sin dudas, les pertenece a los mexicanos.
Durante los 80, Soda Stereo, los Fabulosos Cadillacs y otros artistas argentinos conformaron una verdadera invasión sobre otros países de Latinoamérica, que ratificó la supremacía del rock argentino.
Pero hoy, y desde hace varios años, puede constatarse que algunos grupos mexicanos han pasado por encima a las formaciones de rock argentino.
Mientras las bandas más importantes de la escena local (con excepción de la Bersuit, Miranda! y Pericos) se han tornado tan localistas en su mirada y en su sonido, grupos extranjeros como Tacuba lograron conmover por igual a alguien que transita por las calles de Buenos Aires, Lima, el DF o Panamá.
Casi a capella, con apenas unos acorde de guitarra, los Tacuba subieron dieron las “Gracias” y en seguida le pegaron el frenético “No controles” que hizo saltar todo el Club Ciudad de Buenos Aires.
Vestido enteramente de blanco, con un sombrero de copa a tono, Rubén, el pequeño gnomo a cargo de las voces, hizo todo con delicadeza y clase.
Junto al tecladista Emmanuel, al guitarrista Joselo, al bajista Quique y el baterista Luis Ledezma, el cantante pudo abrir la paleta de ritmos y colores que los mexicanos ponen siempre en juego con cada show.
Así hubo momentos mágicos como “Flores”, “Cero y Uno” o como el que generó el nuevo single “Volver a comenzar”, que incluyó unos arreglos vocales a lo Brian Wilson.
“Flores” reflejó la universalidad de la banda porque hablaba de disfrutar la soledad en una urbe inmensa como el DF, San Pablo o Buenos Aires.
Todo el estadio bailó alocado con “Ingrata”, repitió las estrofas de la melancólica “Eres”, agradeció la exquisitez de “El baile y el salón” y se emocionó con el “Como te extraño”, de Leo Dan.
Previamente a los Tacuba también se destacaron anoche Arbol y No Te Va a Gustar. (Télam)
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