Machetti mantiene dudas en el medio

El actual entrenador rojinegro José Machetti recién definirá hoy a los titulares que buscarán abrochar ante Argentinos una victoria impostergable para comenzar a cicatrizar las profundas heridas que dejó la derrota del clásico. El DT odontólogo mantiene dos dudas en el once inicial y están en la mitad de la cancha. Ariel Zapata tiene todos los boletos para jugar de entrada, pero como ladero de Hernán Bernardello, también está la opción de José Luis Villagra. La otra incógnita está en la banda izquierda del mediocampo. Allí la puja está entre Adrián Lucero (con mayor aplicación a la marca) y Leandro Torres (aporta desborde y vértigo de tres cuartos en adelante). Hoy el enigma se develará cuando se pegue la planilla en el vestuario.

   Ayer luego del entrenamiento matutino en Bella Vista, Machetti planteó los dos interrogantes en la alineación principal y confirmó al resto de los jugadores que buscarán el primer triunfo leproso en el Apertura jugando en condición de visitante (fuera de casa Newell’s perdió con Racing, Arsenal y River y empató con Tigre). Además, La Lepra acumula cinco partidos sin victorias, con dos empates y tres derrotas.

   Hoy para el equipo rojinegro es fundamental conseguir un resultado positivo, pero para ello será clave que los jugadores reviertan la pobrísima puesta en escena individual y colectiva que tuvieron ante Central. Ayer todavía el rostro de los integrantes del plantel devolvía consternación y dolor por lo ocurrido en el clásico. Las risas y las bromas se esfumaron de Bella Vista y sólo un triunfo y un rendimiento convincente en La Paternal devolverá la buena onda al búnker leproso.

   Muchos referentes prefirieron no hablar con la prensa a la salida del entrenamiento. El dato positivo es que, además de la bronca posclásico, los jugadores transmitieron una profunda concentración en el crucial desafío de esta tarde. Todos saben que hay material para salir adelante y revertir el magro presente futbolístico que atraviesa el club.

   En cuanto al DT Machetti, se puede decir que no lo sorprende ser el piloto de tormenta. Esta vez le tocó agarrar el fierro caliente ante la intempestiva salida de Pablo Marini y luego de que el plantel sufriera un durísimo revés a manos del clásico rival. El actual entrenador sabe que hoy en la Paternal se juega todo el crédito sobre una hipotética continuidad en el cargo, algo que igualmente no deja de ser una utopía debido a la dura realidad de Newell’s en la tabla del promedio y a la contratación inminente de un técnico con certificado de garantía. Claro que este certificado, en fútbol, no existe.

   La pelota rodará en el estadio Diego Maradona y es lo mejor que le puede pasar a un plantel golpeado: jugar y sacarse la mufa adentro de la cancha. Se impone la reconciliación futbolística para dejar atrás el dolor posclásico. l