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 sábado, 28 de julio de 2007  
Central vendió por 18 millones en un año

La impactante cifra que lograron los canallas con la transferencia de Angel Di María al fútbol europeo puso sobre el tapete la política de ventas que llevó adelante Central en los últimos tiempos. De hecho si se toman en cuenta los últimos trece meses (desde julio de 2006 en adelante) se desprendió de 10 jugadores por un monto de 18.380.000 dólares. Un ingreso más que importante pero que lejos estuvo de corresponderse con un saneamiento económico de la entidad.

  Los pases de Di María (80 por ciento) y Andrés Díaz (50 por ciento) por seis millones de euros a uno de los clubes más importantes de Portugal conformaron la operación más importante en la historia de la institución. Además, llegan en un momento más que necesario, en el que la asfixia económica sólo acerca urgencias a los directivos.

  La triple venta a River, en la que se fueron Marcelo Ojeda, Cristian Villagra y Marco Ruben en el verano pasado es la que más se arrima, por su envergadura, al traspaso de Angelito. Pero ni siquiera tres jugadores juntos consiguieron los dividendos que arrojará el Flaco de barrio Alberdi.

  Desde julio de 2006 a la fecha, el club también vendió a Ricardo Moreira (Independiente), Hernán Encina (Tecos de México), Pablo Vitti (Banfield), Germán Rivarola (Colón) y Emiliano Papa (Vélez).

  En ese sentido hay que aclarar que tanto Vitti como el Sapito Encina llegaron a un acuerdo con el club para desvincularse y compraron sus pases por 300.000 y 400.000 dólares respectivamente.

  Dentro de este lapso, Central cedió sin cargo al volante Gustavo Lorenzetti (Concepción de Chile), al zaguero Ramiro Fassi (Sporting Cristal) y al defensor Germán Leonforte (Huracán). Todos jugadores que no tenían lugar de preferencia en el plantel canalla y que fueron liberados para que puedan lograr más rodaje en otras instituciones.

  Y si la mirada se remonta un poco más atrás en el tiempo, en enero de 2006 el lateral Paulo Ferrari pasó a River Plate por 1.400.000 dólares y el centrodelantero Emanuel Villa hizo lo propio a Atlas de México por 1.700.000 de la misma moneda, por el 50% del pase que les correspondía a los auriazules.

  Necesitado de ventas. Así vive este Central. Esta es la realidad que domina a un club que pierde 800.000 pesos mensuales a través de su déficit operativo y que por esa cuestión se ve obligado a desprenderse sistemáticamente de sus mejores valores.
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