Fiesta patria

Mollaghan pidió no confundir solidaridad con proselitismo

Fue en el marco del Tedeum por el 25 de Mayo. Lifschitz enumeró los desafíos pendientes

Silvia Carafa / La Capital

"No hay que confundir solidaridad con proselitismo", remarcó ayer el arzobispo de Rosario, José Luis Mollaghan, en el Tedeum con el que se conmemoró en la catedral el Día de la Patria. Y pidió acelerar la inclusión porque, pese al crecimiento económico, "la pobreza y la inequidad siguen siendo problemas fundamentales". Con esta homilía, el sacerdote cerró el acto central por los 197 años de la Revolución de Mayo que se realizó en la plaza que evoca esa gesta y convocó a las autoridades locales junto a representantes de instituciones civiles, militares y religiosas.

Por su parte, el intendente Miguel Lifschitz destacó que el 25 de Mayo de 1810 "fue un punto de inflexión en nuestra historia", al tiempo que señaló que en la actualidad "hay otras revoluciones pendientes".

Así, tanto el arzobispo de Rosario como el intendente Lifschitz eligieron centrar sus mensajes en los desafíos sociales pendientes y en el crecimiento de la ciudad como construcción colectiva.

Pero el prelado fue más allá y, sin olvidar que se transita por tiempos electorales, bregó porque la clase dirigente no utilice la solidaridad para hacer campaña.

Con la solemnidad del Tedeum y a metros de una clase dirigente que lo escuchó atenta desde la primera fila, pidió "no confundir solidaridad con proselitismo".

Lifschitz, en tanto, remarcó que "la lucha contra la exclusión, una democracia de instituciones sólidas y la garantía de un crecimiento económico para los próximos años forman parte de las construcciones pendientes". Y añadió un detalle que hilvana los anteriores enunciados: priorizar los objetivos comunes por sobre intereses particulares.


Por la historia
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En su homilía, instó a defender la vida desde su concepción, al bien común de todos los hombres, al federalismo como fortalecimiento institucional de las provincias y a la reconciliación. Remarcó que "más allá de la Justicia y de todo lo que haya que hacer para obtener los caminos legítimos de lo que es bueno y recto, tenemos que perdonar y reconciliarnos para mirar el futuro", explicó.

"La Revolución de Mayo es un punto de partida que nos llevó a ser quienes somos. Fue un proceso que con la consagración de la Constitución en 1853, nos convirtió en una Nación jurídicamente organizada", dijo a su turno el coronel Belisario Afranccino, en uso de la palabra.


Salto al futuro
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Del acto oficial también participaron los diputados nacionales Hermes Binner y Olinda Montenegro (Chaco), el legislador provincial Raúl Lamberto, el subsecretario de Seguridad Pública, Gustavo Peters, y el presidente de la Corte de Justicia, Roberto Falistocco. Además de autoridades consulares, policiales, del Ejército, la Armada, Prefectura y Gendarmería, junto a una delegación del Liceo Aeronáutico Militar. También asistieron ex combatientes de Malvinas y dignatarios de distintos credos religiosos.

Mollaghan durante la homilia por el 25 de Mayo.