Los vecinos están muy expectantes

Los vecinos al predio donde se levanta el casino están expectantes. Sienten que la obra que ven surgir no les cambiará la vida pero modificará la cara del lugar, y presienten que de algún modo quedarán ligados a una dimensión socioeconómica que jamás soñaron. Con el tiempo quizás se desvanezca la esperanza de que la estética de la barriada cambie como un conjuro. Tal vez al final sólo queden unidos a la casa de juegos por la infraestructura que hace años vienen pidiendo y que hoy parece cercana. Por lo pronto, dicen que aumentó el valor de sus inmuebles y los quiosquitos florecieron como retoños en primavera.

La zona va tomando ritmo. Subió el tránsito de vehículos y personas y en el obrador ubicado entre Batlle y Ordóñez, Oroño, Moreno y Circunvalación van y vienen unos 800 operarios que en su mayoría son de la zona. Los barrios Las Delicias, 17 de Agosto, Techitos Verdes y La Granada tienen manzanas linderas al combo vip que formarán el casino, la sala de convenciones y un hotel cinco estrellas. Aunque esa proximidad tiene un efecto de onda y se atenúa cuadras adentro.

"Hace poco vino un joyero a preguntar si se vendía alguna casa", relataron en la esquina de Oroño y Batlle y Ordóñez. Y dejaron caer una anécdota de la picaresca vernácula: el letrero de una casa en venta anuncia salida al casino cuando en realidad está como a veinte cuadras. Pero no fueron los únicos en sincerar travesuras. Otros deslizaron entre bromas que los amigos de lo ajeno ya se están frotando las manos "cuando agarren a algunos de los visitantes mal parados. La inseguridad está en todas partes y por acá también".

"¿Ve todo esto? Acá no había nada y mire ahora", señaló Alejandro frente a su taller de repuestos para motos, en Batlle y Ordóñez y Balcarce. Un par de grúas gigantescas, movimiento de suelo y hormigón al por mayor están ahora sobre el terreno que hasta hace poco era un baldío de fútbol dominguero y una boca de lobo por las noches. En un suburbio de sueños sencillos la construcción se agiganta ante los ojos de los vecinos cuentapropistas, empleados, changarines, obreros y desocupados.


Empleo
Por el momento hay trabajo para la gente de los barrios vecinos porque la obra es muy grande dijo Dionisio Verón un oficial albañil de Tío Rolo mientras esperaba el alta en la puerta del obrador Cristian Gauna también ya pasó por la revisación médica y tiene esperanzas de conseguir un puesto de trabajo en el obrador

En su opinión, la presencia del casino generó mucho movimiento en la zona, desde los quioscos que venden sándwiches, tortas fritas y asadas, facturas y gaseosas, hasta el alquiler desmedido de habitaciones.

Según los vecinos, el beneficio para el barrio pasará muy lejos del glamour que tendrán las obras terminadas. Por lo pronto, además del mayor margen inmobiliario, ellos esperan tener cloacas, iluminación, ensanche y mejoras de las calles y sobre todo, mayor seguridad, enumeró Marcelo Sasu.

"Sí, estamos recopados con esto porque es algo inesperado", asintió un grupo de vecinos.


Risas y política
A metros de la charla la frase de un cartel gigante preside la escena Podemos más asegura una publicidad para las próximas elecciones Un grupo de vecinos percibe la coincidencia ríen y explican Al casino no vamos a entrar porque somos pobres y morochitos nos conformamos con que ensanchen esta cuadra saquen las zanjas pongan cloacas y más luces enumeraron l