Aguilar conoce a los barrabravas

El presidente lo reconoció ante la fiscal

El presidente de River, José María Aguilar, quien admitió conocer a Alan Schlenker y Adrián Rousseau -líderes de dos fracciones de Los Borrachos del Tablón- deslindó ayer su responsabilidad en el enfrentamiento entre barrabravas registrado el febrero último en el área de quinchos del club.

Aguilar se presentó a declarar ante la fiscal contravencional Claudia Barcia, quien sospecha que una posible connivencia entre las autoridades de River y Los Borrachos del Tablón, o al menos un accionar negligente por parte de la cúpula del club permitió que barrabravas armados se enfrentarán el 11 de febrero último en una zona recreativa donde decenas de socios disfrutaban de un domingo de asado y pileta.

River "ya sufrió muchas condenas: una condena pública, una condena institucional, y también dejó de jugar en su cancha a raíz de la clausura del Monumental dispuesta por los incidentes en los quinchos", sostuvo Aguilar, y se quejó porque por esa "medida arbitraria hemos perdido más de dos millones de dólares".

"Estoy imputado en una contravención", explicó Aguilar, antes de la audiencia con la fiscal, quien también había citado a los vicepresidentes de River Julio Macchi y Domingo Díaz y al dirigente Antonio Caselli.

Schlenker y Rousseau también fueron convocados en el marco del proceso, pero ambos se ampararon en su derecho de negarse a declarar, al igual que otros hinchas imputados.