Anuario. La música, el canto y la danza clásica protagonizaron una variada propuesta

Rosario es un polo de atracción de manifestaciones del arte universal

Orquestas sinfónicas y de cámara junto a solistas y cantantes convocaron a miles de espectadores

Marcelo Menichetti / La Capital

La temporada 2006 ofreció un espectro amplio y variado de espectáculos para los amantes de la música, la danza y la ópera. Los teatros rosarinos contaron con la visita de grandes artistas y sus plateas recibieron una importante cantidad de público, con algunos llenos que auguran buenas perspectivas para las temporadas venideras. Que Rosario se haya convertido en el destino elegido por muchos turistas argentinos y extranjeros -hecho novedoso en la ciudad que se incrementó después del Congreso de la Lengua Española-, sugiere que buena parte de esos visitantes influyeron en el favorable balance final de las instituciones que programan la denominada "temporada clásica".

Entre los espectáculos más notables del año se cuentan las puestas de la Opera de Rosario (ver recuadro) que montó en el teatro El Círculo "I Pagliacci" y "La voz humana" interpretadas por Darío Volonté y Vera Cirkovic, respectivamente. Otro momento inolvidable del año fue la presentación del oratorio "Israel en Egipto", de Georg F. Haendel, ofrecido por el Pro Musica Antiqua de Rosario y el Coro Estable de Rosario que dirige Cristián Hernández Larguía, el 1º de agosto último en el Auditorio Fundación Astengo. El mismo director condujo el multitudinario concierto "Cantemos la Navidad", ofrecido en el Monumento Nacional a la Bandera ante 10 mil personas. Y no se puede soslayar el hecho excepcional que constituyeron las actuaciones de Julio Bocca, Maximiliano Guerra e Iñaki Urlezaga que protagonizaron sendos espectáculos en el escenario de El Círculo.

La Asociación Cultural El Círculo y el Mozarteum Argentino Filial Rosario fueron los dos grandes programadores de espectáculos a los que se sumaron los ofrecidos por la Orquesta de Cámara Municipal que dirige Roberto Fabbroni, los realizados en el Centro Cultural Parque de España, y los que, sobre el final de 2006, inauguraron el Auditorio de la Escuela Municipal de Música "Juan Bautista Massa".

Entre los grandes elencos instrumentales que se presentaron ante el público rosarino se destacaron la Orquesta Sinfónica de Escocia, compuesta por 105 músicos y dirigida por Iván Volkof, que actuó en el Auditorio Fundación Astengo, y la Orquesta Real de Galicia, con 90 instrumentistas conducidos por Ron Marbá en El Círculo.

Como ya se dijo, para los amantes de la danza también fue un año especial ya que se vieron espectáculos como el ofrecido por el Ballet Gran Teatro, integrado por las primeras figuras del Teatro Colón de Buenos Aires; el Royal Ballet y el Ballet de Santiago de Chile, que actuaron en el Auditorio Fundación Astengo. Pero las más esperadas, sin dudas, fueron las actuaciones de Julio Bocca, Maximiliano Guerra y el Ballet del Mercosur e Iñaki Urlezaga y el Ballet Concierto; y el cierre de la temporada a cargo el Ballet Nacional de Cuba que dirige Alicia Alonso.

La música académica ganó espacios, en los últimos tiempos, en franjas de público que hasta ahora se mantenían ajenas a esas manifestaciones artísticas. El fenómeno permitió que durante el año que se termina visitaran la ciudad orquestas de cámara, tríos y dúos provenientes de distintos rincones del mundo y que todos contaran con una buena recepción. Entre esos grupos y solistas hay que destacar a la Orquesta de Cámara de Filadelfia, los Solisti Di Pavia, la Orquesta Virtuosi de Praga y el Quarteto Di Cremona. Entre los solistas podemos citar a los pianistas Stefano Greco e Ivan Rutkauskas y a los dúos integrados por Aldo Antognazzi (piano) y Rafael Gintoli (violín) y Gabriela Montero (piano) y Gautier Capuchón (chelo). A estos espectáculos debe sumarse el calendario anual de la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario que dirige Javier Logioia Orbe.

El creciente interés del público por la música académica puede atribuirse a la mayor afluencia de visitantes a Rosario, pero sin dudas pesa mucho más el constante y denodado esfuerzo por parte de los artistas y las instituciones que los nuclean para difundir estas manifestaciones del arte.

Vistas en conjunto y a la distancia sorprende la multiplicidad de propuestas en una programación rica y variada que ofrece muy buenos exponentes de cada disciplina, que van desde los conjuntos locales con muchos años de labor y artistas internacionales que llegan a este rincón del planeta para mostrar su arte.

El tenor Darío Volonté se lució en el protagónico de "I Pagliacci".