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miércoles,
29 de
noviembre de
2006 |
Guillermo íntimo
La charla fue derivándose por distintos temas y permitió descubrir a un Guillermo íntimo que no ahorró palabras a la hora de hablar de sus afectos.
-¿Cómo te autodefinirías?
-Soy muy tímido, pero cuando entro en confianza soy otro. No me gusta llamar la atención para nada, por eso salgo poco y siempre estoy con una gorra, lentes y estoy todo tapado. No soy demostrativo pero soy una persona que necesita cariño. Soy otra cosa fuera de una cancha de tenis, soy tranquilo y me gusta mucho estar con mis amigos, compartir asados o ir de viaje con ellos.
-¿Cómo es la vida a nivel familiar?
-Siempre que voy a Venado, mi casa está llena de gente. La puerta de mi casa está siempre abierta y siempre hay alguien. Allá se habla mucho de fútbol y de tenis casi nada.
-¿Qué papel juega Carla, tu mujer, en tu vida?
-Para mí es la persona más importante. Me ayudó muchísimo y estuvo en las buenas y en las malas, nunca me dio la espalda. Estar con ella es lo más lindo que me puede pasar y no me arrepiento para nada de haberme casado tan joven.
-Cómo te ves para el 2007?
-Va a ser un año difícil. Vengo de muchos meses sin jugar y sé que al principio me va a costar bastante. Pero me veo bien.
-¿Podemos hablar de un nuevo Guillermo Coria?
-Sí. Estamos formando un nuevo jugador y me quedan muchos años más en el circuito. Este parate me vino muy bien y el mal año, espectacular. Aunque suene muy loco para mí fue muy positivo. Los últimos tres años, cuando estuve entre los diez primeros, fue como que no valoraba las cosas como lo hago ahora. En el tenis nadie te regala nada y me encanta volver a tener el desafío de estar ahí arriba y de sentir esa adrenalina que tanto extrañaba.
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