Hidromasajes: torrente de relax

Paulina Schmidt

La fuerza del agua se convierte en un masaje placentero y continuo. El hidromasaje favorece la relajación del cuerpo y de la mente. El calor, la flotabilidad y los masajes trabajan en conjunto para lograr la distensión profunda. La acción masajeadora es generada por un chorro que mezcla agua y aire a través de jets. De fácil colocación y sin necesidad de romper el revestimiento, es posible tener un spa en casa.

Además de la sensación de relax que produce el golpe del agua sobre todo el cuerpo, muchos acompañan el hidromasaje con hidroterapia con el fin de contrarrestar algunas dolencias musculares.

La medida o el diseño no son un impedimento a la hora de colocar el sistema. Una bañera estándar se puede cambiar rápidamente por otra con hidromasajes. Casi cincuenta modelos en el mercado satisfacen y se adaptan a las necesidades y preferencias del usuario, con mayores alternativas de elección cuando se trata de edificaciones nuevas donde se puede prever el espacio destinado.

De industria nacional, los productos de la línea Acquabell están diseñados en acrílico sanitario reforzado en fibra de vidrio, y mayor resistencia a los impactos externos. Las bañeras funcionan con un motor de 1 a 1,5 HP y su equipamiento básico consiste en dos reguladores de aire, dos succiones, botonera de encendido, desborde y sopapa.

Los jets y cañerías son concebidos especialmente para hidromasajes y están realizados en PVC, lo que les otorga una gran resistencia térmica y mecánica. Las cañerías, soldadas químicamente, evitan cualquier tipo de pérdida de agua o filtraciones. Además garantizan la seguridad, ya que las partes metálicas del motor se encuentran aisladas de todo contacto con el agua.

Las bañeras pueden ser simples o de dos plazas, y la grifería es opcional. En una bañera chica por lo general se colocan seis jets, aunque diez es la cantidad óptima (cuatro laterales, dos dorsales, dos cervicales y dos plantales). De acuerdo al modelo, la capacidad de agua varía de 150 a 200 litros.

El mercado ofrece una gran variedad de modelos y medidas, asesoramiento técnico y relevamiento en obras para garantizar la correcta colocación y seguimiento. El control de calidad es sumamente importante en este tipo de productos. El llenado y reposo de la bañera con agua por cuarenta y ocho horas es uno de los requisitos a tener en cuenta antes de ponerlo en funcionamiento.

Una vez colocada la bañera, es preciso aprender a utilizarla correctamente. En un hidromasaje existen tres factores que trabajan conjuntamente: calor, flotabilidad y masajes.


Hidroterapia
Para obtener una relajación profunda y placentera, el sistema de hidromasajes casi siempre se acompaña con hidroterapia. Algunas dolencias musculares o malestares encuentran alivio mediante este sistema. Como ejemplo vale mencionar que la inmersión en agua caliente, a la temperatura del cuerpo, provoca la dilatación de los vasos sanguíneos, incrementando la circulación. La flotabilidad del agua reduce el peso del cuerpo en un 85 ó 90 por ciento, aliviando la presión sobre las articulaciones y los músculos.

Una serie de accesorios complementan el sistema de hidromasajes. El display ayuda a determinar con exactitud la temperatura del agua, que por lo general promedia los 37 grados. En estadías prolongadas o en invierno, también se puede incorporar un calentador eléctrico, que mantiene la temperatura.

El generador de ozono es otra alternativa aconsejable para la estética de la piel, arrugas, estrías y adiposidades. Su funcionamiento consiste en una pequeña descarga que rompe las moléculas de agua, formando las de ozono. Esta cápsula es descartable y funciona cada vez que se pulsa el hidromasaje, con una vida útil de dos a tres años.

La aromaterapia a base de sales, aceites y esencias, también colabora con el principio de la relajación, al igual que el colchón de burbujas, que sumerge en una sensación de máxima flotabilidad. Este sistema funciona de manera independiente a los jets de agua y trabaja sólo con inyectores de aire. Consta de tres velocidades y es ideal para tratamientos terapéuticos de rehabilitación.

Los expertos recomiendan no someterse a hidromasaje por más de veinte minutos, debido a que el cuerpo se distiende demasiado.