Cielo Razzo despide un año de éxitos en el Anfiteatro Humberto De Nito

"Nos cuesta darnos cuenta de lo que nos pasa y de que somos una banda nacional"

El cantante Pablo Pino manifestó con humildad que los músicos de la banda son "algo reacios al elogio"

U.G. Mauro / La Capital

"Sólo podemos explicar este momento recordando que todos los días, a las 5 de la tarde, seguimos estando en la sala de ensayos. Aunque no tengamos una actuación encima, estamos allí ensayando, cantando, probando cosas", confesó a LaCapital el cantante y armoniquista Pablo Pino, líder de Cielo Razzo que, hoy a las 21.30, en el Anfiteatro Municipal, presenta su disco "Audiografía" y el primer DVD de la banda.

Pino integra Cielo Razzo junto a Juan Pablo Bruno (percusión); Javier Robledo (batería), Cristián Narváez (bajo) y Fernando Aime y Diego Almirón (guitarras) y en la actualidad son la banda rosarina de rock de mayor trascendencia nacional.

-¿Resumirías este momento con la frase futbolera "esto es el fruto del trabajo de la semana"?

-Sí, seguro; aunque es el trabajo de todos estos años; de grabar, editar, pensar en salir a tocar afuera, de estar dedicados de lleno a pensar en la música y que eso sea nuestro oficio, que en la Argentina es algo poco pensado y hasta incluso mal visto por algunos, pero bien visto por nosotros, que amamos la música. Ahora tenemos la posibilidad de dedicarnos por tiempo completo a la música y eso nos da la tranquilidad de dedicarnos por completo a ella.

-¿Son conscientes de que ya no son unos chicos rosarinos que "vamos a ver si llegan", sino una banda instalada en el panorama nacional?

-Se sienten cosas raras. Nos cuesta darnos cuenta de lo que nos está pasando y aceptar que somos una banda nacional, pero sabemos que convocamos a mucha gente, que hicimos dos estadio Obras, que salimos a tocar por todos lados y que la gente nos conoce. Pero creo que son momentos de los grupos. Leí por ahí algo que define esto y es que "somos algo reacios al elogio", y así nos sentimos .

-¿Creés que hubo además un poco de suerte?

-Creo que la mayoría de los grupos, con constancia, con trabajo y años, pueden llegar a ocupar un buen lugar. No hablo de venta de discos, capacidad de los shows y todas esas cosas que cada uno sabe, pero sí en cuanto a estar en la cabeza de la gente de todo este quilombo que son los medios, las bandas, el público y los productores. En algún momento, por alguna razón, uno se siente colega de toda esa gente, y así, de un día para otro, pasamos a ser tipos consultados por grandes medios para sus encuestas y en Buenos Aires recibir elogios o críticas.

-¿El boom de la banda se vive de un modo particular a la hora de actuar?

-Todavía nosotros podemos actuar para 50 personas o para 10.000 del mismo modo. Las presiones pueden ser distintas, pero nosotros transmitimos siempre la sensación de que trabajamos por igual para cualquier público que sea. Lo que si nos pareció raro es llegar a Buenos Aires y que haya periodistas que crean opinión que nos tengan tan bien conceptuados.

-¿Buenos Aires los valora como sucesores del éxito de la Trova?

-Efectivamente ocurre que, aunque hagamos cosas muy distintas, cuando uno deja entrever la condición de rosarino, inmediatamente salta el nombre de ellos y nos ponen como los que les seguimos. No es nada fácil y se vive con orgullo porque, al menos en mi caso, siempre fui fana de Fito y Baglietto. Nosotros somos, como dije, reacios al cumplido, y no lo aceptamos inmediatamente, pero cuando lo pensás, decís «qué locura» y te llenás de orgullo y placer.

-¿Hay nuevos proyectos?

-Estamos intentando componer todo lo que tenemos en la cabeza para un próximo disco que aún no tiene ninguna fecha. No estamos apurando el disco, pero si a nosotros mismos, porque tenemos un montón de canciones en la cabeza pero queremos bajarlas a la sala de ensayo. Se trata de apurar el trámite de armar definitivamente la canción.

-¿Se sienten condicionados en su producción ante tanto reconocimiento recibido?

-No sé si siempre se llega a esa instancia, pero lo que a todos nosotros nos da miedo es perder la mística, la esencia del grupo. Con la compañía somos socios y ellos nos dicen: "Ustedes sigan haciendo las cosas que estén haciendo, que nosotros nos encargamos de venderlas", y eso es lo que hicimos y haremos. Si tenemos la suerte de hacer un disco que venda mucho, será así; si tenemos la suerte de hacer uno que no vende mucho, pero es artísticamente mejor... será otra suerte.

-¿Cuál es la metodología de trabajo del grupo?

-Es muy Cielo Razzo; todas las canciones se terminan dentro de la sala de ensayo. Estamos tranquilos porque a la gente uno todavía le sigue intentando decir cosas.

La banda rosarina estrena hoy el CD y el DVD "Audiografía".