Tarde de terror. El gobernador Obeid, la vicegobernadora y el intendente Lifschitz se reunieron para aunar esfuerzos

Lifschitz y Obeid coordinan la ayuda tras la tormenta

La Nación mandó 12.500 chapas y 5 mil tirantes que fueron entregados sólo a familias afectadas

Lucas Ameriso / La Capital

Rosario se encamina lentamente a recuperar su fisonomía tras la trágica tormenta que se abatió el miércoles con una pedrea de granizo sin antecedentes. Ayer por la tarde el gobernador Jorge Obeid se reunió con el intendente Miguel Lifschitz para coordinar en conjunto la situación en los barrios más afectados por el temporal. El clima ayudó a calmar los ánimos en los sectores más castigados, pero aun así los piquetes volvieron sobre Circunvalación y los accesos a la ciudad. El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación envió 12.500 chapas, 1.800 colchones y 5 mil tirantes en el marco de una política de distribución focalizada de los recursos. Obeid se comprometió a priorizar la reparación de unas 400 viviendas de barrio Santa Lucía e indicó que no declarará el estado de emergencia. En tanto, el jefe comunal estimó que para el lunes la ciudad podría volver a la normalidad.

La actividad del mandatario santafesino comenzó a las 7 en su despacho de la Casa Gris, donde recibió un pormenorizado informe del comité de crisis, que desde el inicio de la pedrea viene relevando los daños en diferentes puntos críticos de la ciudad.

Horas después tomó personalmente contacto con los damnificados al recorrer diversos barrios de la periferia rosarina y a las 14.30 se reunió con Lifschitz y ambos gabinetes para evaluar el cuadro de situación.

A esa hora, los vecinos de barrios muy humildes seguían adelante con piquetes que tuvieron lugar en Francia al 4500, 27 de Febrero y Castellanos, Presidente Perón y Felipe Moré y en el acceso a la autopista a Buenos Aires, para citar sólo los más emblemáticos. También las quejas prevalecían en Oroño y Seguí.

El pedido de chapas y tirantes fue unánime y numeroso; sin embargo, el correr de las horas, la presencia de funcionarios y la llegada de la ayuda social hizo que la efervescencia social fuera bajando de intensidad.

"Hemos hecho un control punto a punto, de carácter social y no policial", subrayó Obeid y prometió que "a medida que pasen las horas se va a ir dando solución concreta a los problemas y descenderá el nivel de conflicto".


Un millón de la Nación
En gran medida el millón cincuenta mil pesos que el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación envió a la zona afectada fue determinante. "Nos ha dado una mano grande en lo que hace a elementos materiales para incrementar la ayuda que se necesitaba dar en tiempo y forma", reconoció Obeid, al tiempo que destacó "la coordinación y cooperación con que los equipos (de la provincia y la Municipalidad) se encuentran trabajando, lo que además de ser una buena señal de convivencia agiliza mucho esas tareas".

La cartera social hizo una primera entrega de materiales que totalizaron 12.500 chapas, 1.800 colchones y 5.000 tirantes, a los que se agregaron frazadas, rollos de membranas y polietileno. Junto a la asistencia material, el ministerio que conduce Alicia Kirchner envió un equipo de profesionales y técnicos abocados a trabajar en los barrios más castigados.

Por su parte, el gobierno provincial ya estudia el modo de traducir su apoyo económico en créditos otorgados por el Banco Municipal. Para Obeid existen dos focos de atención fundamentales: los barrios arrasados por el granizo y las escuelas que aún permanecen sin poder dar clases. "Vamos a profundizar los trabajos de restauración en los establecimientos dañados durante todo el fin de semana", destacó.

Para ello, "las cooperadoras ya tienen a su disposición partidas del Ministerio de Educación", indicó el mandatario santafesino. El objetivo es retomar el ciclo lectivo en todas las escuelas de Rosario. "Queremos que la semana que viene no haya un sólo edificio escolar afectado", auguró el gobernador. Inicialmente, la cartera educativa destinará tres millones de pesos para reparar las 47 escuelas con problemas edilicios en toda la región VI.

Obeid y Lifschitz destacaron que la entrega de chapas, plástico y otros insumos se está desarrollando con total normalidad y de acuerdo a un puntilloso relevamiento que los equipos de la provincia y la Municipalidad están llevando a cabo en barrios como Santa Lucía y Villa Banana, entre otros.

Por otra parte, Obeid afirmó que a partir de hoy se iniciaban las tareas para reparar todas las viviendas comprometidas en su estructura, particularmente las 464 del barrio Santa Lucía.

La cumbre de municipio y provincia se produjo a primeras horas de la tarde. El mandatario santafesino, la vicegobernadora María Eugenia Bielsa y el jefe comunal mantuvieron el encuentro acompañados de sus más estrechos colaboradores. Al término del encuentro, Lifschitz consideró que "probablemente los piquetes continúen en función de la impaciencia", pero destacó la coordinación con la provincia. "Estimamos que para el lunes la situación ya podría estar normalizada", afirmó el jefe comunal. "La meta es atender a la gente afectada por la tormenta y no estamos dando respuestas masivas", puntualizó Bielsa.

El gobernador y el intendente se reunieron para aunar esfuerzos.