Detectaron a choferes que habían ingerido alcohol

Walter Gasparetti / La Capital

Cañada de Gómez.- Un sorpresivo operativo de alcoholemia realizado en la ruta nacional Nº 9, en el radio urbano de esta ciudad, que involucró a efectivos de la Unidad Regional X, inspectores municipales, bomberos voluntarios, miembros de Defensa Civil y representantes del grupo de Padres Autoconvocados, detectó que al menos tres conductores de camiones de carga lo hacían con alcohol en sangre.

Los operativos se ejecutaron al cabo de dos días, en horario nocturno, durante algo más de dos horas. El grupo de trabajo armó el procedimiento a la altura del club Sport Club Cañadense, en las intersección de las calles Pellegrini y Quintana.

La idea de los organizadores de los controles es repetirlo este fin de semana en otro sector de esa misma cinta asfáltica. El jefe de la policía del departamento Iriondo, León Perot, sostuvo en ese sentido que los procedimientos se llevarán a cabo en la ruta 34, a la altura de Totoras, y en la ruta 11, en jurisdicción de Oliveros.

Los tres camioneros, que iban al mando de un camión Scania 113, un Fiat Iveco y un Mercedes Benz, oriundos de las ciudades cordobesas de Río Cuarto, Oliva y Marcos Juárez, respectivamente, fueron trasladados a la sede policial de esta ciudad, sitio donde se les iniciaron actuaciones por la infracción al artículo 104 de la Ley Provincial 10.703.

El jefe policial añadió que el sistema fue implementado a raíz de una decisión tomada por la policía de la provincia. "Muere mucha gente a causa de accidentes y la policía pretende hacer un aporte para frenar ese flagelo", acotó Perot.

La Unidad Regional X recurrió a la experiencia de un grupo de padres que funcionan de manera autoconvocada, cuya tarea desde hace aproximadamente un año es hacer esos mismos controles en el radio urbano, todos los fines de semana. Las estadísticas oficiales del municipio indican que desde que los se hacen los operativos los accidentes en horarios de madrugada disminuyeron significativamente. El sistema funciona de la siguiente manera: los uniformados detienen a los vehículos mientras transitan por la ruta y los padres miden con un alcoholímetro que es de su propiedad. Si control arroja resultado positivo, el vehículo pasa a parque cerrado y se repiten las mediciones hasta que el conductor se estabilice.