|
domingo,
29 de
octubre de
2006 |
Córdoba no tuvo ideas
No le supo ganar a nueve jugadores de Merlo
Lucas Vitantonio / La Capital
Las condiciones eran inmejorables para que Central Córdoba volviera a cantar victoria ante su gente. El impresentable juez del partido, Gabriel Guillaume, que redondeó una actuación realmente patética, mandó a las duchas en el amanecer del juego al delantero de Deportivo Merlo Luis Avalo. Luego también vio la roja el DT visitante Juan Kopriva y encima antes del final del primer tiempo Mario Pierani puso en ventaja al charrúa como para que la casa esté en orden. Claro que esto es fútbol y nada es lo que parece. En el complemento Ariel Otermín clavó el empate de cabeza y todo volvió a foja cero.
El equipo de Tablada intentó por todos los medios pero pagó carísimo la anemia de ideas. Incluso, no tuvo luces en los minutos finales cuando la visita también perdió a Osvaldo Vila. El 1 a 1 fue un castigo para el local y un premio abultado para los bonaerenses.
El primer tiempo la cancha fue un tobogán hacia el arco de Deportivo Merlo. El charrúa salió hecho una tromba y de haber tenido puntería hubiera definido el pleito en esa etapa. Armani fue el que mostró mayor instinto para perforar la red visitante. Primero ensayó una volea que contuvo el arquero Bernardo Luqui, luego dibujó una tijera que casi abre el marcador y más tarde no tuvo precisión para capitalizar de cabeza un envío de Bezombe.
Igual, la más clara en primeros 45 minutos estuvo en el remate de Lorenzo De Jesús que estremeció el travesaño, luego de que Raponi bajara de cabeza un centro al segundo palo.
Así, en etapa inicial el charrúa pudo sacar provecho de la supremacía numérica (a los 17' se fue expulsado Avalo) y por ello no sorprendió a nadie que se pusiera en ventaja tras una buena definición de Pierani, que con los ojos bien abiertos y parado en el corazón del área puso la pelota lejos del alcance del arquero.
Todo se encaminaba a un victoria segura e imprescindible para seguir cerca de los líderes en la recta final del Apertura. Pero la sorpresa invadió Tablada a los seis minutos del complemento cuando Otermín cabeceó con maestría un centro que cayó desde la derecha y empató la chapa, justo en la primera llegada visitante.
Después, Córdoba agigantó la figura de Luqui con tapadas notables a Pierani, Bezombe y Armani. Córdoba quiso, pero no pudo y encima jugó los últimos 15' con dos hombres de ventaja por la expulsión de Vila. La superioridad numérica no fue supremacía de ideas y por eso el juego finalizó empatado. El pueblo charrúa se fue masticando la bronca de lo que pudo ser y no fue.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
Bezombe no tuvo una buena tarde y Córdoba lo sintió.
|
|
|